SANSE 2

SPORTING 1

Tercera victoria consecutiva y segunda que se decide en el último suspiro y desde los once metros. Le van las emociones fuertes al Sanse y que sigan si son así porque el triunfo de anoche, además de premiar el buen partido de los donostiarras, les mete de lleno en la pelea por la permanencia. El propio Sporting se queda a seis puntos, en clara dinámica descendente y con el golaverage para los txuriurdines, y el Mirandés, que marca la salvación y que visitará el Reale Arena dentro de dos semanas, ya sólo está a cuatro puntos.

Salvo en su último cuarto de hora, cuando tocó sufrir, el partido bailó al ritmo que marcó el Sanse. El Sporting pegó un par de sustos en los minutos iniciales, con dos balones largos a Djuka. El segundo acabó en gol aunque fue anulado por fuera de juego. Pero el fútbol rápido y directo fue el único plan de los rojiblancos y no les salió bien porque las pocas ocasiones en las que robaron el balón, lo perdieron de inmediato a manos de un rival mucho más paciente.

Sola, Alkain y Jonathan Gómez hacían daño por bandas, con Navarro y Karrikaburu enredando por arriba. El gol llegó rápido, con jugada de Alkain y remate en propia puerta de un defensa pero el árbitro lo anuló por una supuesta falta del hondarribitarra que no llegaba ni a personal. Siguió intentándolo el Sanse y en su segunda ocasión clara lo logró. Filtró Olasagasti y definió Karrikaburu. Era la última jugada del primer tiempo.

Tras el descanso siguieron mandando los locales. Pero no llegaba el segundo y tocó lamentarlo cuando el Sporting aprovechó un error defensivo para marcar en su primera ocasión. Se animaron los asturianos, pero el Sanse tampoco se conformó, forzó un córner en el descuento y el penalti discutible de Ramírez permitió a Karrikaburu sentenciar.