La mejor manera de asegurar la presencia en Europa League

Una Real valiente no se conformó nunca con un empate que podía ser un buen resultado y remontó con los goles de Isak y Zubimendi.

VILLARREAL CLUB FÚTBOL 1

REAL SOCIEDAD 2

La Real se aseguró de la mejor manera posible la sexta plaza que permite jugar la Europa League la próxima temporada y todavía tiene la opción de acabar quinta si gana al Atlético de Madrid en la ultima jornada en Anoeta y pierde el Betis en su campo contra el Real Madrid.

En lugar de salir a especular con un empate que le podía servir ante un rival directo para llegar con tres puntos de ventaja a la última jornada, la Real salió con valentía a por la victoria desde el primer minuto y no cambió cuando consiguió el empate en el segundo tiempo tras el susto del gol de Coquelin antes del descanso y de la opción que tuvo Chukwueze para marcar el 2-0 poco antes.

El 1-2 marcado por Zubimendi, un pivote defensivo, en el área pequeña refleja lo que fue el partido de la Real, que salió a buscar a su rival desde el primer minuto en su campo, nunca dio por bueno el empate y encontró el premio de la victoria ante un campeón de la Europa League de la pasada temporada y semifinalista de la Champions de ésta que ha quedado por detrás de la Real los dos años y tendrá que sacar los mismos puntos que el Athletic en la última jornada para entrar en Europa.

Imanol dio continuidad a la forma de jugar de los últimos partidos con el 4-4-2 en rombo, con la vuelta de Le Normand e Isak tras cumplir su partido de sanción en lugar de Aritz y Januzaj y la entrada de Illarra y Zaldua en sustitución de Rafinha y Gorosabel. Así la Real comenzó muy bien el partido.

En los cuatro primeros minutos tuvo una clara opción de Sorloth que Rulli desbarató al taparle bien el espacio y sacar una gran mano ante el intento de vaselina del noruego y el portero argentino también despejó con el pie uno de los dos remates de Isak en ese comienzo.

Real y Villarreal salieron a buscar arriba a sus rivales para impedirles que jugaran desde atrás con una presión de los dos delanteros de cada equipo a los centrales que obligaba a los porteros, sobre todo a Rulli, a jugar en largo. Ante el mal comienzo, Emery colocó a Foyth casi como tercer central para impedir que cada jugada de ataque realista acabara en opción clara.

Con el paso de los minutos el Villarreal fue a más. Dia ganó un balón a Zubeldia en el área y Zubimendi molestó a Lo Celso para evitar su remate, Remiro enmendó ante Chukwueze un error suyo en la salida de balón y detuvo también un disparo de Parejo desde fuera del área.

Fruto de esa mejoría llegó el gol del Villarreal en una demostración de que Emery es un genio en la estrategia. En un corner sacado en corto, Parejo buscó la entrada desde atrás de Coquelin, que culminó la jugada con una volea perfecta.

Una buena reacción

El Villarreal nunca había perdido esta temporada en Liga cuando se había puesto por delante y ganó 16 de los 20 partidos en los que se adelantó, pero la Real fue capaz de darle la vuelta al marcador en la segunda parte.

Gorosabel sustituyó a Zaldua en el descanso tras ver una tarjeta amarilla sacada por un González Fuertes muy desacertado en todo el encuentro. En el primer tiempo solo amonestó en una jugada en la que el lateral donostiarra no tocó al rival y dejó de sacar cartulinas que sí merecían otros jugadores.

La entrada del lateral fue clave porque fue el protagonista del centro de la jugada del empate que Isak solo tuvo que empujar en el segundo palo a puerta cerrada porque Pau Torres y Rulli dudaron y no atacaron el balón que recorrió todo el área pequeña con mucho veneno.

Poco antes Chukwueze pudo sentenciar el encuentro al rematar fuera por poco un gran pase de Lo Celso y enseguida llegó la jugada polémica del partido cuando González Fuertes señaló un penalti inexistente a Illarra sobre Capoue. Era tan clara la jugada, no había un contacto que la pudiera justificar, que Del Cerro Grande desde el VAR tuvo que pedir al asturiano que la revisara y tardó varios minutos en enmendar su enésimo error ante la evidencia.

La Real no se asustó tras esa jugada y Zubimendi marcó el 1-2 al culminar una jugada de David Silva, otra vez inmenso, e Isak que Sorloth no pudo rematar. El balón quedó suelto en el área y el medio centro llegó para marcar. Los blanquiazules defendieron bien la ventaja y celebraron en el campo su tercera presencia seguida en la Europa League, con los mayores ingresos económicos que supone.