Más de un centenar de jubilados, con carteles y pancartas, se congregaron ayer en los jardines de Alderdi Eder, frente al Ayuntamiento donostiarra, para acompañar la salida de la marcha ciclista, formada por una treintena de personas, que recorrerá hasta el próximo 25 de junio distintas poblaciones de la geografía vasca para exigir una pensión mínima de 1.080 euros.

Serán en total 13 días y otras tantas etapas, durante las que la marcha ciclista, formada por el pelotón y varios vehículos, difundirá por pueblos y ciudades la reivindicación de «pensiones públicas dignas, justas y suficientes» que las distintas asociaciones de pensionistas han reclamado los últimos años en sus movilizaciones.

La portavoz de la Asamblea de Pensionistas de Alderdi Eder, María Serrano, explicó ante los medios que esa es la reivindicación general de la marcha ciclista, que se concreta en una pensión mínima de 1.080 euros por 14 pagas anuales, tal como exigieron hace un mes ante la sede del Parlamento de Gasteiz.

Serrano agregó que reclaman a Lakua y al Ejecutivo de Nafarroa que, mientras el Gobierno español no fije esa cuantía como la mínima a ingresar, la complementen ellos con partidas específicas en sus respectivos presupuestos del próximo año.

“Cada paso, cada pedalada, vale mucho” es el lema con el que se celebra la marcha que, según matizó Serrano, también se desarrolla «en defensa de los servicios públicos, acechados por la privatización», y en favor del «trabajo de cuidados compartidos».

Un grupo de dulzaineros y txistularis aportó el ambiente festivo a la salida del pelotón de jubilados, que vestían camisetas amarillas conmemorativas de la marcha y unos pañuelos azules al cuello, con el símbolo de un tejo abrazado por un hombre y una mujer, que estrenó ayer la agrupación de pensionistas de la capital guipuzcoana.

La movilización concluyó su primera etapa en Azpeitia, de donde tenía previsto salir esta mañana con destino Ondarroa y, tras un itinerario que pasará por Zornotza y Plentzia, alcanzará Bilbo este viernes.

Con un trayecto de unos 50 kilómetros por día, la Marcha Ciclista de los pensionistas llegará a Gasteiz el día 19 y a Iruñea el 21, desde donde se dirigirá hacia Bera y de ahí a Baiona, donde parará el 23 de junio.

Tras pasar por Irun, los ciclistas se dirigirán de nuevo el sábado 25 a Donostia, donde al mediodía protagonizarán una manifestación con la que el Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria dará por concluida esta nueva iniciativa reivindicativa.

Precisamente a esta marcha se refirió a través de un comunicado el sindicato LAB, que expresó su apoyo a las y los pensionistas, colectivo que, en su opinión, ha demostrado «fuerza y compromiso» en numerosas movilizaciones y cuya «lucha por unas pensiones dignas es la lucha de todos los trabajadores».