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TEHERÁN

Irán detiene a varios diplomáticos extranjeros acusados de espionaje

La Guardia Revolucionaria de Irán detuvo ayer a varios a diplomáticos extranjeros, incluido el segundo cargo diplomático británico en el país, acusados de espionaje, según informaron la agencia de noticias iraní Fars y la televisión estatal.

«El servicio de inteligencia de la Guardia Revolucionaria identificó y arrestó a diplomáticos de embajadas extranjeras que estaban espiando en Irán», señaló Fars.

La agencia aseguró que uno de ellos, un británico, fue expulsado del país después de que se disculpara, pero la televisión estatal indicó que el diplomático británico, presentado como Giles Whitaker, adjunto al embajador, había sido expulsado del área donde los diplomáticos fueron arrestados en el centro de Irán. La televisión acusó al diplomático británico de haber «realizado operaciones de Inteligencia» en las áreas donde se estaban produciendo maniobras militares.

El vídeo de la televisión muestra imágenes de un hombre, presentado como Giles Whitaker, hablando en una habitación similar a un aula de clases.

El diplomático «está entre las personas que fueron al desierto de Shahdad (centro) con su familia como turista», señaló la cadena.

«Como muestran las imágenes, esta persona estaba tomando fotos (…) en una zona prohibida, donde al mismo tiempo se realizaba un ejercicio militar», informó la televisión, que añadió que «estos espías estaban tomando muestras de tierra» en el desierto central de Irán, donde se llevaron a cabo los ejercicios de misiles por parte de la Guardia Revolucionaria.

La televisión estatal identificó a otro de los arrestados como el esposo de la agregada cultural de Austria en Irán y también un profesor polaco, a los que atribuyó igualmente la toma de muestras coincidiendo con una prueba de misiles.

El pasado mes de marzo fueron liberados dos irano-británicos, Nazanin Zaghari-Ratcliffe y Anoosheh Ashoori, condenados a prisión por cargos que siempre han negado.

Paralelamente, Londres anunció que había saldado una antigua deuda de 394 millones de libras con Teherán, sin establecer un vínculo entre ambos casos.