Mikel INSAUSTI
DONOSTIA
CRÍTICA: «UNICORN WARS»

Duro golpe a las fábulas encantadas de color de rosa

Nunca había imaginado una película capaz de mezclar el impacto del cine bélico de imagen real con las más tiernas mascotas de las películas infantiles animadas, y de ese provocador contraste nace “Unicorn Wars” (2022). Es la culminación de la obra gráfica de Alberto Vázquez, que viene trabajando tanto en el cómic como en sus cortos y largos animados. Su novela gráfica “Psiconautas” dio lugar al premiado cortometraje “Birdboy” (2010), para después traducirse en “Psiconautas, los niños olvidados” (2015), ganador del Goya a Mejor Largometraje de Animación. Y ahora del corto “Sangre de unicornio” (2013) sale “Unicorn Wars”, que es mucho más que una mera versión extendida.

Lo mejor de la nueva propuesta es que el universo de “Uncorn Wars” es una creación única y diferente en sí misma, motivo por el que no perderé el tiempo ennumerando sus muchas referencias tanto al género bélico como a la animación a partir los clásicos de Disney.

Por otra parte la violencia y el terror están en la esencia de los cuentos tradicionales orales y escritos. Así que el orígen de la eterna lucha entre el bien y el mal se halla contenido en la película de un Alberto Vázquez, que de esta forma nos recuerda a través de las fábulas encantadas de dónde venimos y lo que somos. El autor no necesita cargar las tintas con el mensaje antibelicista de estilo simbolista, por la sencilla razón de que el estreno ha coincidido con la invasión de Ucrania, como podía haber coincidido con cualquier otra guerra. El ejército osito en su ataque a los unicornios representa una conflictividad colectiva, que también es individual en los hermanos Azulín y Gordi.