EDITORIALA

No dejar pasar olas ni esconder el segundo bote

Podrá existir la Selección vasca de Pelota vasca». Cualquiera que lea la noticia y no conozca los fundamentos de las políticas española y vasca se mostrará hoy estupefacto. «¿Sus ancestros inventaron un deporte y hasta ahora tenían prohibido representar al país que lo inventó en las competiciones internacionales?», se preguntarán. Y así era, hasta ahora. Es 2022 y el PSOE se siente magnánimo, y necesitado. El PNV ha negociado con sus socios que en adelante puedan existir las selecciones vascas de pelota, de herri kirolak y de surf, las dos primeras por ser deportes propios, por así decirlo, y la tercera por ser la Federación vasca de surf previa a la española. Es una muy buena noticia.

Tanto es así, que el presidente del EBB, Andoni Ortuzar, convocó de urgencia una rueda de prensa. Según explicó, la Ley del Deporte, debatida ayer en el Congreso español por la Comisión de Cultura y Deporte, recogerá una enmienda pactada por PNV y PSOE a través de la que, por primera vez, se reconocen las selecciones vascas «de deportes de arraigo histórico y social». Para ello, las respectivas federaciones internacionales deberán estar de acuerdo. Ortuzar calificó el paso de histórico y consideró que esto abre la puerta a la oficialidad en el resto de deportes. Desgraciadamente, esta segunda parte no es verdad. A la vez que se permite a los deportistas de esos pocos deportes participar en las selecciones que elijan libremente, la norma blinda de manera explícita la supremacía española en el resto de deportes. Legalmente, lo tendrán más difícil, aunque los y las deportistas deseen competir representando a Euskal Herria. Asimismo, la ley toma como unidad las comunidades autónomas, por lo que las y los pelotaris de la CAV y Nafarroa, por ejemplo, competirán separados. Conviene no menospreciar lo logrado, pero tampoco engañarse. Jugar al realismo político implica ser serios.

Euskal Herria es una nación y debe poder tener sus selecciones oficiales. Además, los y las deportistas vascas no son menores de edad. No es normal que un deportista no pueda elegir libremente a qué país quiere representar o qué bandera quiere portar. España siempre tiene miedo a jugar limpio.