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Irán sugiere cambios en la policía de la moral para acallar las protestas

Las declaraciones del fiscal general iraní sobre la policía de la moral y sobre cambios en la ley que regula el uso del velo para las mujeres sugerían reformas con las que el régimen teocrático intenta acallar las protestas que ya han dejado centenares de muertos, aunque medios oficiales desmintieron una abolición de este control social.

Una mujer iraní, detenida por una patrulla de la policia de la moralidad, en una imagen de 2007. (Behrouz MEHRI | AFP)

«La policía de la moralidad (…) ha sido cerrada por quienes la crearon», afirmó el fiscal general iraní, Mohammad Jafar Montazeri, en unas declaraciones que respondían a la cuestión de su menor presencia en las calles pero que fueron interpretadas como el anuncio de la abolición de este cuerpo de control social, lo que medios oficiales desmintieron.

La denominada policía de la moral fue la responsable de la detención de la joven kurda Mahsa Amini, acusada de no respetar el estricto código de vestimenta en la República Islámica, y cuya muerte bajo custodia encendió una ola de protestas que se prolonga desde hace casi tres meses.

El anuncio, con el que el fiscal quiso además desligar a este cuerpo del sistema judicial, se sumó a la decisión de revisar -que no abolir- la ley de 1983 sobre el velo obligatorio.

Ambas declaraciones sugerían cambios en los mecanismos de control policial del régimen de los clérigos chiíes en un intento de acallar el movimiento de protesta.

Aunque se inició como reacción a la muerte de Amini, se ha transformado en un movimiento contra el régimen teocrático, sobre todo en entornos urbanos, académicos y en zonas de Kurdistán y Baluchistán. A pesar de la represión, el movimiento de protesta continúa. El Gobierno iraní admite la muerte de 200 personas, mientras que la Guardia Revolucionaria menciona al menos 300 y varias ONG registran hasta 400 muertes en la represión.

Tanto el presidente del Parlamento, Mohammad Bagher Ghalibaf, como el presidente del país, Ebrahim Raisi, rechazaron cualquier cambio de la Constitución, aunque Raisi señaló que «hay métodos de cumplir la Constitución que pueden ser flexibles».

El mismo fiscal general anunció que el Parlamento y el poder judicial están trabajando en el tema del velo obligatorio y que ofrecerían sus resultados en dos semanas.

Según la ley vigente desde 1983, las mujeres, independientemente de su origen y religión, deben llevar velo y ropa holgada en público. Las mujeres, punta de lanza de la protesta, se han quitado y quemado sus pañuelos al grito de «Mujer, vida, libertad» en manifestaciones y vídeos divulgados en redes sociales.

Un cuerpo creado en 2006 y reforzado por Raisi

Después de 1979, los Comités Revolucionarios Islámicos comenzaron a llevar a cabo patrullas para hacer cumplir el código de vestimenta y la «moral» del nuevo régimen en Irán. Pero la policía de la moral, conocida como Gasht-e Ershad (patrullas de orientación), fue creada por el presidente ultraconservador Mahmoud Ahmadinejad para «difundir la cultura de la decencia y el hiyab».

Compuesta por hombres con uniformes verdes y mujeres con el chador negro que cubre la cabeza y la parte superior del cuerpo, inició sus patrullas en 2006 con el objetivo de hacer cumplir el estricto código de vestimenta que también prohíbe a las mujeres usar pantalones ajustados o pantalones cortos. Las mujeres que violaban el código corrían el riesgo de ser detenidas. Gasht-e Ershad fue creada por el Consejo Supremo de la Revolución Cultural, ahora dirigido por el presidente ultraconservador Ebrahim Raisi, que agudizó estos controles. GARA