Natxo MATXIN
ALAVÉS

Mendizorrotza vive la primera derrota, la tercera consecutiva

El primer tropiezo casero, unido a los dos seguidos en los desplazamientos a Granada y Tenerife, deja claro que el conjunto babazorro está pasando por su peor momento de la temporada.

Primera titularidad este curso de Laguardia, que fue sustituido.
Primera titularidad este curso de Laguardia, que fue sustituido. (Jaizki FONTANEDA | FOKU)

Pese a sus dos derrotas en Granada y Tenerife, tenía el Alavés a su alcance recuperar el liderato, pero los de Luis García Plaza no pasan por su mejor momento y ello resultó palpable ante un rival directo en la lucha por el ascenso, como es el Levante que, con mucha eficacia y orden, contrarrestó el escaso juego albiazul y dejó sentenciado el encuentro antes del descanso.

Era el regreso de Javi Calleja a la que fue su casa entre abril y diciembre de 2021, gestionando ahora seguramente la mejor plantilla de la categoría de plata en cuanto a nombres y presupuesto económico, la cual demostró disponer de una enorme pegada durante la primera parte. No le sirvió de mucho al Alavés ver reforzada su defensa con la primera titularidad de Laguardia, pues se marchó al descanso con doble desventaja en el marcador, una losa muy pesada.

Y es que los levantinistas, en clara proyección ascendente, saltaron al césped babazorro en plan mandón, metiendo al conjunto local en su propio campo y amenazando con criterio la portería de Sivera. Dejando claro además el por qué son uno de los bloques con mejor bagaje visitante, con solo una derrota en sus desplazamientos. Así, superado el primer cuarto de hora vieron plasmado en el elecrónico su trabajo ofensivo, por mediación de un cabezazo del goleador Bouldini.

Pareció necesitar El Glorioso de ese zarpazo para reaccionar y protagonizó varios acercamientos con cierto peligro, pero sin merecer la categoría de ocasiones claras. Algo que el Levante, ahora saliendo rápido en busca de los espacios dejados por los albiazules, sí que tuvo, sobre todo con un lanzamiento roscado de Brugué que se marchó fuera.

Arroyo, que vio la amarilla por un lance fortuito, puso la réplica con un disparo demasiado cruzado en el tramo final (m.39) de un primer periodo que, en su tiempo extra, vivió el segundo sopapo granota, con una gran acción de Son, quien puso el balón en la cepa del poste.

INOPERANCIA

Pese a que el técnico local, Luis García Plaza, intentó darle la vuelta al calcetín desde el banquillo con toda una pléyade de cambios ofensivos, lo cierto es que su equipo careció del tino necesario para generar y llegar con el criterio suficiente como para, al menos, lograr un 1-2 con el que animar a la grada y creer en la remontada.

El Levante fue llevando el partido a donde más le convenía, sin continuidad, plagado de sucesivos parones y faltas. Así les resultó imposible a los anfitriones, que no fabricaron ningún lance de mención, más allá de una peinada de Jason en el 79. El propio jugador gallego resultó el más incisivo, con otro disparo un tanto escorado que se marchó lamiendo el travesaño, pero resultó en vano.