El compromiso y el fútbol dan lumbre a una tarde invernal

Euskal Selekzioa se impone a Chile con goles de Eizagirre, Amaiur y Ane Miren. El compromiso de las futbolistas y la fidelidad de los pocos aficionados que se acercaron a Mendizorrotza dieron temperatura a una tarde fría en la que las vascas fueron muy superiores a su rival.

La selección saldó con victoria su regreso al verde. Los goles de Eizagirre, Amaiur y Ane Miren, tres de las 14 debutantes, sentenciaron el encuentro que enfrentó a las vascas con Chile en un desangelado Mendizorrotza. No se esperaba una gran entrada porque ni la fecha ni la promoción del encuentro eran los adecuados y, efectivamente, apenas 2.500 aficionados se acercaron al estadio gasteiztarra. Su calor y el compromiso que respondieron a la llamada de Juanjo Arregi dieron lumbre a una tarde invernal, no sólo en lo meteorológico, que debería invitar a la reflexión a muchos niveles.

Fidelidad y esfuerzo, sin olvidar el propio fútbol, fueron lo mejor de un partido que la selección ganó con comodidad. Con un once inicial construido sobre una columna vertebral txuriurdin -las cinco representantes de la Real fueron titulares, además de sus excompañeras Gaste y Leire Baños-, impuso su juego desde el principoi ante un rival muy replegado que esperaba robar algún balón para salir a la contra sin conseguirlo. Las vascas incidían especialmente por la derecha con una Cecilia muy activa aunque los remates, más o menos peligrosos, corrieron a cargo de Eizagirre, Amaiur, Sanadri y Jone Ibáñez.

Hubo que esperar casi hasta el descanso para que Eizagirre acabara con el empate tras una combinación con Sanadri. La tolosarra estuvo a punto de ampliar distancias sólo dos minutos después con un duro remate cruzado que se estrelló en la base del poste.

Con la segunda parte llegaron los primeros cambios y un Chile algo más decidido y ofensivo. Pero la selección no tardó en volver a imponerse sobre el terreno de juego y reflejarlo en el marcador. Una gran recuperación y centro de Nerea Nevado permitieron a Amaiur romper el balón para hacer el 2-0 y permitir que el equipo se sintiera aún más cómodo. A seis del final, firmaba el 3-0 a centro de Maitane.

Victoria y buena imagen de las vascas en un partido que acaba con la incógnita habitual: cuándo y cómo volverán a reunirse.