Natxo MATXIN
Interview
jon azkue
Jugador del Bidasoa Irun

«Me quedo con el ascenso de 2016 y la última jugada contra el Sporting»

Al final de esta temporada, Jon Azkue (Orio, 1994) pondrá fin a once años de trayectoria en Bidasoa, un periodo en el que, como asegura, tanto el club como él personalmente «hemos ido creciendo de la mano».

(Gorka RUBIIO | FOKU)

Jon Azkue probará fortuna en otra liga -se habla de la francesa, él ni lo confirma ni lo desmiente- después de más de una década defendiendo la camiseta amarilla del club irundarra, donde se ha convertido en un central de mucha calidad y ha crecido como persona.

¿Por qué ha decidido dar este cambio de rumbo a su trayectoria deportiva?

He pasado muchos años aquí y siempre me ha rondado la idea de quedarme aquí toda la vida, pero también tenía un poco la espinita de intentar probar fuera, de buscar otras experiencias, de probarme a mí mismo, de competir en otro entorno que no fuera el que ya conozco. Después de pensarlo y meditarlo mucho, por edad, madurez y trayectoria, he pensado que este era el momento de dar el paso.

¿Busca quizás un título?

Ojalá. Al final son muchos años aquí y, por desgracia, quizás pocos títulos, es lo que tiene la Liga Asobal, que el Barcelona te deja poco margen.

¿Y por qué anunciarlo mediada la temporada?

Pues porque la gente empieza a hablar y estas cosas se van sabiendo. Una vez que la decisión estaba tomada, he creído que lo mejor era que el anuncio saliera de mi boca y de este modo ir cerrando el tema.

Bidasoa ha variado mucho en estos 11 años. ¿Cuánto ha cambiado Jon Azkue?

Muchísimo. Llegué con 17 años recién cumplidos, con lo que eso significa a nivel de madurez y experiencia. Me iré con 29, siendo otra persona diferente, con más tablas y muchísimas experiencias en la mochila. Todo eso es gracias a lo que me ha dado Bidasoa.

¿Podría decirse entonces que su madurez como jugador ha ido ligada a la del club?

Creo que hemos ido de la mano durante todos estos años. Empezamos los dos en División de Plata, con menos experiencia, y hemos ido alcanzando grandes momentos, hasta llegar a jugar una Liga de Campeones.

¿Le ha curtido el haber defendido la camiseta amarilla en diferentes categorías y situaciones?

En la plantilla hay ahora jugadores que llevan 3-4 años en el equipo y están acostumbrados a jugar en Europa e ir a ganar a pabellones complicados, lo ven como algo normal. En mi primer año estábamos en División de Plata luchando por no descender. Eso te da una perspectiva diferente, momentos y vivencias que te hacen madurar y también valorar las cosas de otra manera, dándole la importancia que tienen las situaciones en cada momento.

¿Y a lo qué le da más valor de esta algo más de una década en Bidasoa?

A todo, al aprendizaje, a la madurez que he conseguido en todo este tiempo, al crecimiento que ha tenido el club y el balonmano en Irun, que estaba un poco apagado. La gente ha vuelto a creer y soñar con el Bidasoa.

De todo este tiempo, ¿con qué momento se queda?

El ascenso del 2016, que lo logramos al tercer intento, ese último minuto con el pabellón hasta la bandera, toda la celebración de después, para mí ha sido el culmen. También la jugada final ante el Sporting en Liga de Campeones, que nos dio la primera plaza con un Artaleku a reventar.

De los que ha tenido, ¿qué entrenador le ha marcado más?

Todos han hecho que Jon Azkue sea mejor y que el club haya tirado hacia arriba. Desde Fernando Herrero, que es con el que llegué, hasta Fernando Bolea, con el que tuve una química especial y conseguimos el ascenso. Y ahora con Jacobo Cuétara que, como ya he dicho, considero que es el artífice de todos los éxitos del Bidasoa de los últimos años.

Se habla de que podría recalar en la liga francesa…

La decisión ya está tomada y eso es así, en su momento ya se conocerá mi destino. Cuando el club quiera hacerlo oficial, se anunciará y hablaremos de ello.

¿Qué mensaje le gustaría lanzar a la afición bidasotarra?

Sobre todo palabras de agradecimiento, por todo lo que me han dado a nivel personal, pero también hacia el club y a Irun, por hacer que Bidasoa haya crecido muchísimo. Nuestra afición es uno de los referentes a nivel estatal, allí donde jugamos siempre está. Y todo el mundo que visita Artaleku valora lo mucho que sabe y que anima al equipo. Es uno de los mejores pabellones de la liga. Ha sido un placer tenerlos como aficionados, pero todavía quedan seis meses largos para disfutar juntos.