Amparo LASHERAS
Periodista
AZKEN PUNTUA

«Entzunez Eraiki»

Mañana comenzará un nuevo año. Y como el 2023 es tiempo de elecciones, comenzará también otro destino político. En el imaginario literario existe una frase atribuida a Machado que dice, «para dialogar, preguntad primero… después escuchad». Más o menos lo que ha pretendido el PNV con la iniciativa preelectoral Entzunez Eraiki. La diferencia con el poeta es que Machado lo decía de corazón y, en la CAV, la experiencia de tantos gobiernos prepotentes ha demostrado que, a los jeltzales, la palabra «escuchad» les viene muy grande porque nunca ha estado en su ADN político. El día 24, un dirigente del PNV dio otra vuelta de tuerca a la hipocresía que caracteriza a su formación. Restó importancia a las críticas y presentó a su partido como el hada madrina de la democracia, medalla de oro en la gestión institucional y, además, anunció compromisos con el cambio climático, el feminismo, la interculturalidad… una agenda a la carta que recuerda la idea que aparece en “El Gatopardo”: «para que todo siga igual, necesitamos que todo cambie». Adecuándola al lema del PNV, lo de «construir escuchando» equivale a prometer lo que la gente quiere escuchar para luego… hacer la política de siempre. Por eso, los aplausos de Sánchez Galán (Iberdrola) en la presentación tienen un sentido muy fácil de entender.