Jornada fatídica para los equipos vascos de balonmano de la élite. Los tres que jugaron ayer perdieron. Helvetia Anaitasuna, que regresaba a su casa tres meses después, puso fin a su racha de cuatro victorias consecutivas cayendo ante el Bledio Sinfín (28-30). A pesar de que los de Quique Domínguez se fueron 16-13 por delante al descanso, la cosa cambió en la segunda parte.

Alonso colocó a los cántabros a un solo gol de su rival antes de que Aly detuviese un penalti al capitán Chocarro. Castellanos empató y Basualdo puso el 24-25. Sinfín se adelantó por primera vez a falta de diez minutos para el final. El portero egipcio Aly fue determinante con sus paradas. Detuvo los tres penaltis que lanzó a su equipo al triunfo.

SIN PREMIO PARA LAS CHICAS

Beti Onak acabó perdiendo frente a Porriño tras llevar controlado el partido hasta mediada la segunda parte, momento en el que el cuadro de Atarrabia se cayó estrepitosamente y terminó perdiendo (28-32). De un 22-19 que fue fiel reflejo de la distancia positiva que manejó el cuadro de Atarrabia durante el primer periodo y la mitad del segundo se pasó a un 22-26 en el que el bloque gallego puso la suficiente tierra de por medio como para ganar el duelo.

Zubileta Evolution Zuazo tampoco pudo sacar adelante su partido, lejos de casa y ante otro de los gallitos de la categoría, el Costa del Sol Málaga (31-24). Las de Barakaldo aguantaron las embestidas de sus rivales y en el minuto 44 se pusieron a solo dos goles con el gol de Magdalena Fernández-Agustí (20-18). Aunque Zuazo se resistió a caer, en el tramo final el Málaga se volvió a escapar hasta el 31-24 con un último parcial de 4-1.