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EUROLIGA

Saski Baskonia suma en Bolonia su décima derrota fuera de casa en Europa

Los gasteiztarras aguantaron el tirón con los 25 puntos de Giedraitis y la gran primera mitad de Hommes, pero pagaron demasiado caro sus errores.

Tornike Shengelia hizo sangre con sus penetraciones en la pintura del Baskonia. (@VIRTUS BOLONIA)

En una jornada en la que casi todos los rivales directos de Saski Baskonia en la clasificación de la Euroliga habían perdido, el club gasteiztarra cosechaba su décima derrota fuera de casa en competición europea. Los de Joan Peñarroya fueron víctimas de sus propios errores ante un rival irregular pero que tiene a veteranísimos como Belinelli, Teodosic o Hackett que en los momentos clave supieron estar donde el partido requería.

De poco sirvieron los 25 puntos de Rokas Giedraitis o la maravillosa primera mitad de Daulton Hommes. Abusar del triple, la exagerada flojera defensiva, sobre todo en la pintura y cierta condoción de «pardillo» de los de Peñarroya volvían a costar demasiado caro. Y es que Saski Baskonia no gana lejos de casa en Europa desde el mes de diciembre.

LUCES EN LA OSCURIDAD

El duelo de «corneados por la Copa» -la Virtus perdió la finalísima ante la Brescia- arrancaba con apagones de luz en el Segafredo Arena y un 9-0 entre Teodosic y Ojeleye. Pero por fortuna, cuando volvió la luz, entre Hommes y Giedraitis, con nueve puntos por cabeza, Saski Baskonia firmaba un parcial de 4-18 ntre Hommes y Giedraitis, lo cual provocaba el tiempo muerto y el enojo de Sergio Scariolo.

El duelo dejó bastante que desear en toda la primera mitad, con anotaciones espasmódicas y una ausencia de fluidez absoluta.

Pese al desacierto de Howard, que nuevamente acabó eliminado por faltas, los gasteiztarras llevaron la iniciativa en el marcador, hasta que cuatro triples de Belinelli devolvieron la ventaja a la Virtus, que llegó al descanso nuevamente por delante: 44-41.

Se le acabó la pólvora a Hommes tras el receso, pero Howard la encontrñó bien seca, sumando 10 puntos en el tercer asalto, ideales para mantener al Baskonia en la pelea. No obstante, la defensa en la pintura era pésima, dejando una autopista para las penetraciones de Shengelia.

Con todo, Giedraitis mantenía la esperanza para el equipo con sus jugadas de «dos más uno». Demasiado poco cuando Teodosic y Belinelli, tirando de un oficio tremendo, reventaron el partido.