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8M EN EL MUNDO

Los derechos de las mujeres retroceden en el mundo

A la izquierda, manifestantes en Ciudad de México. En el centro, protesta a favor del aborto en Austin, Texas. A la derecha, acción en Kabul. (Alfredo ESTRELLA-Brandon BELL | AFP)

Millones de mujeres salieron ayer a las calles para defender sus derechos, reclamar el fin de las discriminaciones y también de los feminicidios, en auge en México y Colombia. Derechos de mujeres y niñas que han registrado avances que están originando crecientes reacciones adversas y sufriendo retrocesos, según alertó Naciones Unidas, que pidio más esfuerzos para preservar lo conseguido.

«La igualdad de género se aleja cada vez más. Es necesario invertir esta tendencia, de lo contrario, la igualdad de género no se alcanzará en los próximos 300 años», alertaron representantes oficiales ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, que culparon de esta situación a las «políticas restrictivas que despojan a las mujeres de su autonomía, movilidad, educación y libertad de expresión».

Ante el Consejo de Seguridad, lamentaron la revocación de algunas leyes que fueron creadas para hacer frente a la discriminación y a la violencia machistas. «Pedimos la creación de un entorno seguro y propicio para que los movimientos feministas y la sociedad civil combatan estas tendencias contrarias a sus derechos», aseguraron.

Constataron, además, que pese a una resolución del año 2000 destinada a proteger a las mujeres de los conflictos armados e incluirlas en los procesos de paz, estas siguen siendo las primeras víctimas de las guerras y están subrepresentadas en las mesas de negociación.

En 20 años, «no hemos modificado de manera significativa la composición de las mesas de negociación de la paz, ni alterado la impunidad que disfrutan aquellos que perpetran atrocidades contra las mujeres y las jóvenes», lamentó la directora de ONU Mujer, Sima Bahous, quien citó Afganistáno la guerra de Ucrania.

Los motivos para movilización en el Día Internacional de la Mujer, son numerosos en todo el mundo: las prohibiciones impuestas en Afganistán, la represión de las protestas en Irán por la muerte de Mahsa Jinja Amini o el cuestionamiento del derecho al aborto en EEUU, entre otros.

En el Estado francés se exigió «igualdad en el trabajo y en la vida» en movilizaciones celebradas bajo el signo de la lucha contra la reforma de las pensiones, criticada por ser injusta con las mujeres.

Mientras, en el Estado español, la división en el movimiento feminista se vio ayer reflejada en las calles de Madrid: la marcha convocada por el movimiento feminista, en la que participaron representantes del PP, exigió la dimisión de la ministra de Igualdad, Irene Monterio, y la abolición de la prostitución, y expresó su rechazo a la ‘ley trans’; la tradicional de la Comisión 8M contó con participación de ministras del PSOE y la propia Montero con diferentes pancartas.

En el conservador y patriarcal Pakistán, miles de mujeres salieron a las calles pese a los intentos de las autoridades de varias ciudades por impedir las marchas con el pretexto de las «pancartas controvertidas» que abordaban temas considerados tabú como como el divorcio, el acoso sexual o la menstruación.

Derecho al aborto

Las feministas en EEUU se movilizaron en particular para defender el derecho al aborto, cuestionado por la decisión de la Corte Suprema de revocar en junio la sentencia Roe vs. Wade de 1973 que garantizaba este derecho.

Un derecho que en Europa también se ha visto debilitado recientemente en Hungría y Polonia.

Afganistán, el Estado «más represivo»

La ONU llamó a los talibanes a poner fin «inmediatamente» a las «restricciones draconianas» que imponen a las mujeres en Afganistán, que calificó como el «país más represivo» del mundo en este campo y «uno de los casos más extremos para el retroceso de los derechos de las mujeres», desde el retorno de los talibanes al poder en agosto de 2021. «Ha sido desgarrador ser testigo de los esfuerzos metódicos, deliberados y sistemáticos de los talibanes para mantener a las mujeres y niñas afganas fuera de la esfera pública», «borrando» dos décadas de progreso en materia de derechos de las mujeres, denunció Otunbayeva, directora de la misión de asistencia de la ONU en Afganistán.

Grupos de mujeres se manifestaron ayer en las calles de Kabul y el lunes ante las puertas de varias universidades, coincidiendo con la reanudación de unas clases que les han sido vetadas, para reclamar los derechos y libertades perdidas, así como «trabajo y educación».GARA

La revolución contra el velo en Irán

Más allá de las protestas, muchas mujeres han dejado en Irán de cubrirse el cabello con el velo en la calle, un acto revolucionario que simboliza su lucha feminista en una República Islámica donde el hombre tiene la última palabra sobre muchos de los derechos de las mujeres. El velo es un omnipresente símbolo de Irán y para muchas iraníes representa la forma visible de la discriminación que sufren, que va mucho más allá de tener que cubrirse la cabeza. Esta lucha se libra de manera cotidiana, sin aspavientos ni consignas, dejando sencillamente de hacerlo.

La muerte Masha Jinja Amini desató las mayores protestas en décadas, protagonizadas por jóvenes al grito de «mujer, vida libertad», que casi han desaparecido tras una represión que ha causado casi 500 muertos y en las que han sido ahorcados cuatro manifestantes. Las protestas han desaparecido, pero muchas mujeres siguen su lucha dejando al aire sus melenas, a veces en llamativos colores azul eléctrico, morado o rosa, en un gesto de desobediencia ante unas leyes injustas.GARA

La lacra del feminicio en México, Colombia y Brasil

Decenas de miles de mexicanas marcharon ayer en una jornada marcada por la ola de violencia machista en uno de los países del mundo más afectados por esta lacra, con más de diez mujeres muertas cada día, y lo hicieron bajo las consignas “Ni una sola mujer asesinada” y “Contra la violencia machista y el trabajo precario”. Una encuesta difundida ayer recoge que casi dos de cada tres mujeres, el 63% del total, se sienten inseguras y, según Oxfam, sufren en su trabajo desigualdad salarial, acoso, hostigamiento y violencia.

Las manifestaciones en Colombia se centraron en exigir acciones ante el aumento del número de feminicidios, que pasó de 182, en 2020, a 614, el año pasado, según datos oficiales.

En Brasil, donde cada seis horas muere una mujer, Luiz Inácio Lula da Silva presentó «más de 20 acciones» para acabar con la desigualdad salarial, combatir la violencia machista y garantizar la salud menstrual, mientras el Gobierno advertía de la necesidad de luchar contra los feminicidios.GARA