Dos contragolpes y cuatro palos hacen semifinalista al Athletic

Osasuna fue superior en la primera parte pero envió cuatro remates a la madera, mientras Azkona acertó en la única ocasión de su equipo. Peke amplió distancias tras el descanso pero el gol de Carmen recuperó la emoción para la recta final.

El Athletic disputará las semifinales de Copa por sexta ocasión en su historia. Cumplió con las previsiones imponiéndose en Tajonar aunque tampoco fallaron quienes, empezando por ambas entrenadoras, auguraron un partido muy exigente para el ganador. Porque Osasuna, efectivamente, nunca se rinde y ayer no sólo fue mejor en el primer tiempo sino que también supo, ya en el segundo, sobreponerse al cansancio y a una desventaja de dos goles para volver a apretar y acortar distancias. Pero se encontró con un rival efectivo y los palos: cuatro remates nada menos, se fueron a la madera.

Las rojillas entraron intensas al partido pero en los primeros minutos el Athletic supo templarle con la presión y se estiró en un par de robos. La eliminatoria se rompió rápido y en dos sentidos porque en el minuto once cambiaron el marcador y el panorama sobre el césped. Un minuto despues de que un chutazo de Valero se estrellara en el larquero, Azkona resolvía una contra para marcar el 0-1 y Osasuna respondía echándose con todo en busca de la remontada.

Esta vez sufrió el Athletic ante un rival que tenía la pelota y la combinaba, entraba por bandas, sobre todo por la derecha, y también lastimaba a balón parado. Pero los palos se emperraron en negarle la recompensa. Al cuarto de hora, Vilariño remató un córner al larguero. Las rojiblancas apenas eran capaces de salir de su parcela y menos aún con peligro, apenas un par de apariciones mediado este primer tiempo y una intentona de Peke poco antes del descanso. Para entonces Osasuna ya había soltado otros dos gritos de rabia, prácticamente consecutivos. Primero en un córner, que Vera remataba, sí, al palo y un minuto después en un centro desde la izquierda que Valero enviaba también a la madera.

El descanso le vino de maravilla al Athletic. Iraia Iturregi debió tocar las teclas adecuadas en el vestuario porque su equipo, que regresó con Oguiza por Yulema -Clara Pinedo adelantó su posición-, volvió. El cansancio que se le iba acumulando a Osasuna también contribuiría pero las rojiblancas, mas tensionadas, adelantaron líneas y alejaron el balón de su portería.

Kakun Mainz vio que la eliminatoria se le iba y también recurrió al banquillo, en su caso para oxigenar el ataque con la entrada de Jara y Carmen. Acertó de pleno porque el gol fue cosa de ambas pero para cuando llegó, el Athletic había ampliado su renta. Otra vez a la contra, firmado ahora por Peke. Osasuna sólo tardaba tres minutos en meterse otra vez en el partido con el 2-1, que llegaba por la derecha con asistencia de Jara, remate de Carmen y colaboración de Quiñones.

Las rojiblancas respondieron con un par de buenos intentos pero esta vez les falló el acierto y entre el temor a perder el billete a la Final Four y el arreón final de un rival que no quiso darse por vencido, acabaron sufriendo y con la vista fija en el cronómetro.