Amaia U. LASAGABASTER
EIBAR

Reencuentro con el triunfo para recuperar confianza de cara al play-off

Un gol de Matheus da la victoria al Eibar, que no ganaba desde marzo. Venancio vio la roja y se perderá el primer partido del play-off.

Matheus trata de llevarse el balón ante la presión de Obeng.
Matheus trata de llevarse el balón ante la presión de Obeng. (LALIGA)

Dos meses y siete días después, el Eibar volvió a ganar. Demasiado tarde para hacerse con el billete directo a Primera que aquel lunes de marzo en Miranda parecía tener en su mano pero a tiempo de devolver a los armeros al menos parte de la confianza que han perdido en esta terrible recta final de la temporada.

No les vendrá mal en el play-off, que arrancan frente al Alavés y que afrontan en la misma quinta plaza en la que llegaron a Huesca, por lo que no contarán con ningún tipo de ventaja, al menos en la primera eliminatoria. Pierden, además, a Venancio, como mínimo para el primer partido, después de que ayer viese la roja por una acción que también debería suponerle algún tipo de castigo por parte de su propio equipo. No es comprensible que en el minuto 97 suelte la mano como lo hizo, en una acción sin peligro y en un partido en el que la victoria era importante pero no vital.

Más aún teniendo en cuenta que Gaizka Garitano había dejado clara su prioridad de salvaguardar al mayor número posible de jugadores. Por algo Nolaskoain y Arbilla, apercibidos, se quedaron fuera de un once inédito, que incluyó la segunda titularidad de Chema. En el lateral zurdo se colocó el albaceteño, un auténtico agujero negro esta temporada.

Fue, el del Alcoraz, un partido sin demasiada historia. El Eibar quiso pero le costó, como le viene pasando estos dos últimos meses. Y el Huesca también quiso pero a la manera de un equipo que es el rey del empate -19 ha firmado, casi la mitad de los partidos que ha jugado-. Remató al palo Vilarrasa y Javi Martínez exigió a Luca en un chut duro y dirigido, mientras el Eibar probó, con más insistencia pero menos claridad, con Bautista, Stoichkov o Rahmani.

Apretaron los armeros con el partido aparentemente abocado a las tablas y en el 82, Matheus hizo buena la insistencia aprovechando un rechace desde la frontal tras un centro de Tejero. La tontería de Venancio agrió el final del encuentro.