Salía favorito en las apuestas y Jaka cumplió con el pronóstico, pese a que le costó entrar en el partido, teniendo que sobreponerse a un muy mal inicio de partido en el que Urrutikoetxea llevó la batuta. Tan es así, que el de Zaratamo logró ponerse por delante con una cuantiosa ventaja (7-0) que, a la postre, no supo gestionar.

Con hasta cuatro afilados saques, un preciso remate y sendos errores de Jaka, el pelotari vizcaino abrió una brecha que parecía podía darle la suficiente tranquilidad como para inclinar el envite a su favor.

No fue así. El delantero de Lizartza, que reconoció a la conclusión del duelo que no le iban las piernas en ese complicado inicio -sumó dos triunfos entre el viernes y ayer después de estar de luna de miel en África-, se fue reponiendo paulatinamente a medida que comenzó a entrar en juego y aparecerle las dudas a Mikel Urrutikoetxea.

No sin esfuerzo, de ese contundente 7-0 se pasó a un más lógico 8-7, a medida que a Erik Jaka le comenzaron a funcionar sus ganchos y el de Zaratamo, mostrar su lado más débil con algunos errores que le impidieron mantener una línea constante de juego.

A partir de ese momento, el choque entró en una fase pareja, con un continuo intercambio de pelotazos y tantos, pero siempre con el lizartzarra en clara línea ascendente. Fue cuestión de tiempo que acabase igualando la contienda y poniéndose por delante en el marcador.

Eso ocurrió con el 9-10, fruto de un tanto de saque, y ya no dejó de llevar la iniciativa en el electrónico. Pleno de confianza, Jaka puso velocidad de crucero para ampliar la distancia con sendos remates que le permitieron abrir cierta brecha en el luminoso (9-12).

URRUTIKOETXEA FLAQUEA

Urrutikoetxea trató de frenar la dinámica adversa, pero resultó en vano, máxime cuando también empezó a flaquear a la hora de devolver los saques de su oponente. Ello llevó el luminoso hasta un clarificador 10-15 que ya dejaba entrever la tendencia del encuentro. La distancia se volvió a ver ampliada hasta los cinco tantos (12-17), si bien Urrutikoetxea no se dio por vencido hasta recortar de nuevo la diferencia y apretar el marcador (15-17).

Dos errores de Jaka le dieron cierta vida al pelotari vizcaino, pero cuando podía empezar a pensar en una remontada volvió a cometer fallos impropios, como una falta de saque que cortó su exigua racha positiva.

Una vez más, flaqueó en el momento menos oportuno, fallando en una dejada al txoko que pudo derivar la tendencia de uno u otro lado. Finalmente, a raíz del 15-18, Jaka vio las cosas mucho más claras y procuró finiquitar la contienda por la vía rápida.

Y eso que el de Zaratamo aún tuvo su enésima oportunidad de volver a meterse en el partido (16-19), pero una pasa, solo comprensible por los nervios, le puso el duelo en bandeja a su rival. Jaka ya se dejó de contemplaciones y puso la directa hacia el triunfo con el 16-20.

Un saque quirúrgico y un remate final le sirvieron para acabar de derrotar a un Urrutikoetxea fallón en lances determinantes y cumplir con las apuestas que le daban como favorito de inicio. Erik Jaka se enfrentará el próximo día de San Fermín a su gran amigo Altuna -este le envió un mensaje de ánimo para verse en ese último partido del torneo- en un Labrit que estará a reventar y, sin duda, con un ambiente festivo de gala.