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ROMA

Las olas de calor extremo se extienden y se repiten por el mundo

Olas de calor e incendios se extienden desde Italia y Grecia a EEUU o China, con récords casi diarios de temperaturas, cuya duración y repetición impulsa el calentamiento global. Italia espera hoy picos de 45 grados a la vez que Grecia prevé 43°C; Alemania 38°C y zonas de China, 40°C. Arizona, en EEUU, lleva quince días por encima de los 43°C.

Una voluntaria entrega botellas de agua a un hombre sin hogar en Phoenix, Arizona.
Una voluntaria entrega botellas de agua a un hombre sin hogar en Phoenix, Arizona. (Brandon BELL | AFP)

Si el pasado junio ya fue el mes más caluroso jamás medido en el mundo, según la agencia europea Copernicus y las estadounidenses NASA y NOAA, y la primera semana completa de julio fue a su vez la más calurosa registrada, según datos de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), las olas de calor se siguen extendiendo por todo el mundo, desde Europa hasta China, pasando por EEUU.

Desde ayer y en los próximos días se esperan nuevos récords históricos de temperatura en Italia, de norte a sur. Hoy, 16 ciudades se encuentran en alerta roja en todo el país, con temperaturas de 36/37°C en Roma, Bolonia, Florencia o Pescara, pero que a partir del lunes puede alcanzar hasta los 42 o 43°C en la capital, rompiendo el récord anterior de 40,5°C registrado en agosto de 2007. Se esperan picos de 45 grados en algunos puntos y se podría batir el récord de 48,8 grados en Sicilia.

El norte de la península no se salvará, con los 38°C que se esperan el martes en Milán.

El Centro Meteorológico Italiano teme «una de las olas de calor más intensas de todos los tiempos y, según la Agencia Espacial Europea, serán el martes y el miércoles los días más calurosos en el país con ocho y hasta diez grados por encima de la media habitual de julio. Entre las víctimas del calor, dos futbolistas aficionados de 48 y 51 años fallecieron el viernes durante partidos en la región de Nápoles.

En Alemania, en gran parte del país las temperaturas podrían subir hasta los 38 grados y se esperan tormentas fuertes con rachas de viento de hasta 110 km/h en algunos puntos.

Grecia también sufre una ola de calor que obliga a las autoridades locales, por segundo día consecutivo, a cerrar la Acrópolis de Atenas durante las horas más calurosas.

LA ACRÓPOLIS CERRADA. «

Si en Atenas se esperan temperaturas de 40°C a 41°C, «la temperatura real que siente (...) el cuerpo es considerablemente más alta» en lo alto de la Acrópolis, justificó la ministra de Cultura griega, Lina Mendoni.

Varios visitantes del lugar han sufrido desfallecimientos en los últimos días y la Cruz Roja se desplegó para repartir diariamente 30.000 botellas de agua y acudir en ayuda de los turistas. Junto al calor, se producen altas concentraciones de polvo africano en casi todo el país.

En Marruecos, donde las olas de calor azotan el país desde principios de verano, se ha emitido una alerta roja para varias provincias.

En Asia, varias provincias del sur, sureste y noroeste de China alcanzan los 35°C y 40°C, según el Observatorio Meteorológico Central.

En Japón, las autoridades han instado a la población a ser cautelosa, ya que se espera que las temperaturas alcancen los 39°C en el este del país.

QUINCE DÍAS A 43°C

También el sur de EEUU se está achicharrando bajo una ola de calor: decenas de millones de personas, desde California hasta Texas, experimentaron temperaturas peligrosamente altas el viernes, y se esperaba que alcanzaran su punto máximo durante el fin de semana.

Phoenix, la capital de Arizona, registró su decimoquinto día consecutivo por encima de los 43 grados el viernes.

En el desierto californiano del Valle de la Muerte los bomberos luchan desde el viernes contra incendios muy violentos, y según el climatólogo Daniel Swain, de la Universidad de California, el mercurio allí podría incluso superar la temperatura del aire más alta en los últimos cien años, 54,4 °C, registrada en el mismo lugar en 2020 y 2021.

Los científicos confirman que las emisiones de gases de efecto invernadero están aumentando la fuerza, la duración y la tasa de repetición de las olas de calor, uno de los eventos meteorológicos más mortíferos, según la OMM.

El verano pasado, solo en Europa, las altas temperaturas causaron más de 60.000 muertes.