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JOPUNTUA

¿Volverá a ser Iruña parte de Navarra?


Declaraba Chivite, presidenta del gobierno de Navarra tras alcanzar un acuerdo el PSN con Geroa Bai y Contigo-Zurekin, que el firmado es un acuerdo de «progreso» y que tiene como propósitos «impulsar políticas dirigidas a colectivos vulnerables, fortalecer los servicios públicos, profundizar los derechos de la ciudadanía…», para bien de Navarra.

Y me pregunto si no serían también deseables para la capital navarra esos mismos compromisos de progreso.

E insiste la líder socialista que su gobierno progresista va a «fortalecer la convivencia, la acción feminista, respecto de los derechos de las personas LGTBI + y la lucha contra la violencia machista…», para bien de Navarra. Y me sigo preguntando si no serían también saludables para Iruña esos mismos hermosos propósitos.

Vuelve a subrayar Chivite que, en representación de la mayoría de los navarros que votaron en las pasadas elecciones y que apuestan por conformar un gobierno progresista, se propone «la defensa de la diversidad, de su patrimonio y de sus lenguas propias, como el euskara (desde la lógica de la realidad sociolingüística)...», para bien de Navarra.

Y sigo sin entender que las defensas de esos preciados valores para Navarra, no lo sean también para Iruña; que lo que en Navarra sea progreso, en Iruña se transforme en retroceso; que lo que en Navarra pasa por virtud en su capital se convierta en anatema.

Agrega la presidenta del reino navarro que es su intención «impulsar infraestructuras, desarrollar el plan estratégico de la convivencia y fomentar la igualdad...», siempre para bien de Navarra.

Y me pregunto por qué entonces Chivite y su partido, en lugar de respaldar a Asiron, el candidato progresista más votado para el ayuntamiento de Iruña, han puesto al frente de la alcaldía a lo más parecido a Vox que hay en Navarra y en su versión más cutre. ¿Para cuándo una moción de censura que incorpore Iruña al «progreso» navarro?

(Preso politikoak aske)