Joseba ITURRIA
Interview
TXOMIN JUARISTI
Corredor del Euskaltel-Euskadi

«Ha sido clave el ambiente del equipo y disfrutar haciendo las cosas bien»

Tras su primera victoria como profesional en la crono de la Volta a Portugal, lo que le permitió acabar segundo la general, destaca el apoyo de «la cuadrilla» que han formado en un equipo del que se siente parte tras participar en el renacimiento en 2018. Agradece además a todos los que le rodean y al Baqué, en el que se formó, tras confirmar que no seguirá en 2024.

(VOLTA A PORTUGAL)

El de Markina Xemein destaca su idilio con Portugal desde que en 2017 hizo segundo en su tercera Volta a Portugal de Futuro y su debut meses después en la Grandissima con los profesionales como stagiaire con Euskadi Murias.

¿Estará feliz tras estrenar el palmarés en Portugal gracias a su progresión en las cronos?

Sí, muy satisfecho. Fui con el objetivo de ganar una etapa y hacer una buena general. El primer día me quedé segundo, el de Torre tercero… Tenía la victoria ahí, pero ganar siempre es difícil. El domingo era la última oportunidad y, tras el batacazo del sábado de la etapa reina, que casi me quedé sin opciones de podio, le pude dar la vuelta y dar mi nivel. Intenté hacer una crono perfecta y ganar la etapa y conseguí el objetivo y hacer segundo en la general. Me quedo con la pena de no poder levantar los brazos, que es lo que tienen las cronos, pero estoy contento. Siempre me ha gustado la modalidad. He cogido la cabra para casa porque quería disputar la Grandissima. No me he obsesionado mucho, pero me adapto bien a la cabra, aerodinámicamente no voy mal y, haciendo pequeñas cositas, se logran grandes cosas.

Se quita mérito a ganar en la Volta a Portugal sin los World Tour, pero había cuatro Pro Teams y los portugueses andan mucho en su vuelta…

No hay que despreciar ni a los portugueses ni a los continentales. Hemos salido 125 corredores y solo gana uno. El nivel cada día aumenta. Ganar en el World Tour es casi imposible para nuestras opciones. Hay que ser realistas, estas carreras se nos adaptan mejor y estamos muy contentos y satisfechos, porque ganar es ganar.

Euskaltel ha ganado dos etapas, con tres corredores entre los nueve primeros de la general y una gran imagen...

Para mí la mayor victoria, al margen de todo el cariño que he recibido de toda la gente, ha sido el apoyo del equipo, de mi familia, mi pareja... Y tener el ambiente que hemos vivido en el equipo. Poder disfrutar como si fuera una cuadrilla, pero haciendo las cosas bien. Siendo profesionales, pero sin olvidar que estamos aquí para pasárnoslo bien. Para mí ha sido la clave de este equipo, que hemos estado disfrutando, trabajando bien. Sabíamos qué teníamos que hacer en la carrera y a qué íbamos y hemos cumplido todo a rajatabla.

¿Tras el golpe de no correr la Vuelta, la de Portugal era el objetivo del final de año?

Hemos dado todo lo que teníamos para correr la Vuelta. Unos se quedan fuera y es la pena, pero me quedo con lo bueno. He ido a Portugal, como el año pasado, que no fui a la Vuelta y fui a la Grandíssima. Me dio ese punto de inflexión para coger confianza y este año me ha dado la oportunidad de ganar una etapa.

Hay que poner objetivos reales, ir paso a paso. No nos podemos poner el objetivo de lograr un Top 10 en la general de la Vuelta, porque para eso hay que trabajar mucho en lo físico y lo mental pero, poco a poco, vamos progresando. El año pasado acabé décimo, disputé etapas y éste he ido a dar otro salto, a por una etapa y una buena general. Me ha salido todo perfecto, estoy supersatisfecho de quedar segundo,

¿Tiene un idilio con Portugal y se adapta bien al calor y a la dureza de sus carreteras?

Me gusta mucho y le tengo especial cariño a esta vuelta. Debuté aquí en profesionales con el Murias de stagiaire y lo pasé muy mal. Todos los días llegaba en la grupeta, a falta de 100 kilómetros ya estaba atrás. Fue muy duro psicológicamente verme fuera de lugar en el campo profesional, pero de los malos momentos se aprende mucho. Me considero un corredor diesel, que tolero bien la fatiga. Pensaba que esta vuelta se me iba a hacer larga, pero no ha sido así y lo demostré el domingo. Sé sufrir y me gusta mucho Portugal. Tiene algo conmigo, me va bien. Le tengo mucho cariño por cómo es Portugal, la gente, la comida, el paisaje, la forma de vivir el ciclismo... Es único Portugal.

Murias no le dio la oportunidad y sí la Fundación en 2018.

Fue un momento de mucha incertidumbre porque pensaba que podía pasar con el Murias y no fue así, pero luego me llamó Mikel Landa y estoy muy agradecido a Murias y a la Fundación. Considero que parte del equipo es mía. Llevamos pocos desde que se fundó el segundo Euskaltel: Gotzon, Ibai, Peio Goikoetxea y yo. Es muy bonito estar en este equipo, en casa, con esta afición y la cultura del ciclismo, con su historia, la marea naranja...

Había dudas y al confirmarse la continuidad el equipo ha retomado el vuelo en Portugal...

Incertidumbre sí ha habido, cuando escuchas que el equipo está pasándolo mal. Pero nos toca dar lo máximo de nosotros, poner todo lo que está en nuestras manos y seguir hacia adelante. Es muy importante tener un equipo como éste en casa para dar el salto a profesionales con toda la base y la cultura que tenemos aquí. Y es un equipo con la historia que ha tenido en el ciclismo. Ha sido la marea naranja, Euskaltel, con victorias en Tour, Giro y Vuelta. Es especial.

Tiene contrato para 2024. ¿Le tocará asumir más galones?

No sé... Ahora no me voy a creer que soy el mejor. Sé que vendrán momentos difíciles y quiero seguir esta línea. Primero descansar y celebrar con los de casa la victoria y esta Volta y tengo el Tour de Langkawi del 23 al 30 de setiembre. Quiero hacerlo bien y el año que viene dar otro saltito.

¿En qué piensa al vivir el mejor momento como ciclista?

Me acuerdo de muchas cosas, de los momentos malos que he pasado y quiero mencionar la desaparición de Baqué. Tengo que agradecer a la familia de Elkar Kirolak porque vengo de ahí. He estado en su cantera y es una pena que desaparezca el equipo sub’23. Hay que agradecer todo el trabajo que ha hecho. Hemos salido de Baqué muchos profesionales, pero aun no pasando, se aprende desde la escuela la disciplina, la constancia y el trabajo.