Marie-Castille Mention-Schaar nos sumerge en la vida de Zahia Ziouani, una directora de orquesta francesa de origen argelino nacida en 1978, una de las pocas que han logrado destacar en un terreno predominantemente dominado por nombres masculinos. La película no se adhiere estrictamente al formato de un biopic, ya que se enfoca en el crucial año de formación de Zahia y su hermana gemela, la violoncelista Fettouma Ziouani, cuando a la edad de 17 años, Zahia inicia su camino para convertirse en directora de orquesta bajo la tutela de su mentor y comienza a vislumbrar la posibilidad de hacer realidad su sueño.

“Divertimento” nos invita a ser partícipes de los ensayos de orquesta y de las alegrías y decepciones que conlleva asumir un reto.

La actriz Oulaya Amamra realiza una entregada interpretación de la protagonista y ello ayuda a dar veracidad a la tenaz travesía de formación que realizó Zahia Ziouani hasta lograr crear su propia orquesta. Esta orquesta -cuyo nombre da título a la película- se convirtió en una experiencia integradora que reúne a adolescentes de los suburbios y otros que provienen del centro de París, trascendiendo tanto las barreras socioeconómicas como las divisiones culturales.

La dirección de Mention-Schaar aporta una sensación de autenticidad a la narrativa, reforzado por la interprtación que realiza Amamra. y todo ello da como resultado un filme estimable que rinde tributo a la perseverancia, la música como lenguaje universal y a la posibilidad de superar desafíos aparentemente insuperables. Un canto optimista que nos recuerda que siempre es posible cumplir un sueño.

Otra cuestión destacada queda subrayada en el guion y, sobre todo en una sentencia que Zahia Ziouani se encargó de derribar: «Dirigir no es para mujeres porque no tienen la suficiente perseverancia».