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Trabajadoras del hogar explican sus razones para la huelga del 30N

Representantes de organizaciones que agrupan a trabajadoras del hogar y cuidados exponen en un artículo público sus motivos para sumarse a la huelga feminista general convocada en Euskal Herria el 30 de noviembre. La ven como un proceso y una oportunidad.

Comparecencia sobre la huelga feminista. (M. DEL VALLE | FOKU)

Representantes de organizaciones como Athca, Bidez Bide, Mujeres del Mundo, Thycna y Trabajadoras No Domesticadas han firmado un artículo en el que destacan la importancia de su participación y aportación a la huelga convocada por el movimiento feminista para el 30 de noviembre en Euskal Herria y exponen los cuatro grandes motivos que les llevan a sumarse.

Consideran, en primer lugar, que la huelga es un proceso: «No creemos en los grandes acontecimientos. Para nosotras, la huelga está siendo un proceso en el que vamos descubriendo nuestras propias formas de estar, ser y visibilizar nuestras voces, cuerpos y relatos. Esto no es fácil -admiten-, a veces los ritmos y las maneras no son las que nos gustan ni las que podemos sostener». Por eso, añaden, que «la huelga es un proceso que no es perfecto; pero estando, aportamos cosas que nos parecen importantes. Nuestro aporte está siendo en primera persona, no desde el victimismo ni desde la crítica, sino desde la apuesta por construir un común en el que estamos involucradas».

Además, la ven como aprendizaje colectivo, ya que «estamos aprendiendo cosas que no imaginábamos: del movimiento feminista, de nuestra propia condición como trabajadoras y, sobre todo, estamos aprendiendo lo que somos capaces de hacer. Tenemos miedo, mucho; vivimos día a día chantajes, amenazas, violencias, y las instituciones nos abandonan...». Aseguran ser conscientes de que «la situación de desprotección nos limita la posibilidad de protestar y nos hace más vulnerables. Por ello, las que estamos, hemos decidido que queremos estar, que no nos vamos a quedar inmóviles, no les vamos a dar el gusto».

La huelga como ruptura-apertura es la tercera razón que aportan. «Incorpora sujetas y luchas que hasta ahora no se contemplaban. El aprendizaje es también romper con ideas preconcebidas y darnos como mujeres trabajadoras de hogar una oportunidad de estar. Estamos generando espacios propios en los que vamos construyendo unidad, fuerza y radicalidad. Partimos desde nosotras, politizando lo que nos pasa y construyendo un relato colectivo que está nutriendo a la huelga que, a su vez, se va tejiendo en una clave de apertura a demandas y realidades que exigimos que estén presentes y que van rompiendo el patrón clásico de huelga al uso», señalan.

Asimismo, contemplan esta huelga como «una oportunidad histórica de cambio que nos incluye a todas y todos. La asumimos con ilusión y responsabilidad, sabiendo que no se trata de un proceso sencillo y que hay cosas que, como trabajadoras de hogar y/o mujeres migradas, nos cuestan más. La vivimos también con cierta responsabilidad, por las compañeras que vienen detrás; para que se encuentren con algo mejor de lo que nos hemos encontrado nosotras».