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INFIERNO EN GAZA

Israel confirma que Ilarramendi murió en el ataque al kibutz Kissufim

El zarauztarra Iván Illarramendi y su esposa murieron durante el ataque de las milicias palestinas del pasado 7 de octubre y no fue secuestrado como se creía en un principio. Análisis de ADN de sus restos quemados confirmaron las identidades, lo que motivó numerosas reacciones de condena en Euskal Herria. El Ayuntamiento de Zarautz ha convocado hoy una concentración.

El zarauztarra Iván Ilarramendi.
El zarauztarra Iván Ilarramendi. (GARA)

Iván Illarramendi, al que se creía secuestrado por Hamas, murió en el ataque de las milicias palestinas del 7 de octubre junto a su esposa, la chilena Loren Garcovich, y no permanecieron secuestrados como se pensó en un primer momento.

Un portavoz del Ministerio de Exteriores israelí confirmó que ambos cadáveres estaban calcinados, con restos que solo son cenizas y escasas partes de sus cuerpos, lo que retrasó la identificación. «Los cadáveres de ambos, que habían sido localizados en el kibutz Kissufim, próximo a Gaza, fueron identificados el martes por la noche» en una morgue de Tel Aviv, señalaron fuentes diplomáticas israelíes.

Illarramendi, de 46 años y con origen en Zarautz, había vivido también varios años en Bilbo. Se encontraba desaparecido desde el 7 de octubre, tras el ataque de las milicias palestinas en varias poblaciones israelíes.

Al no identificarse su cadáver se estimó que se encontraba entre los 240 capturados y llevados a Gaza durante la operación de aquel día, en el que murieron más de 1.400 personas y más de 5.000 resultaron heridas.

Dos días después, el ministro español de Asuntos Exteriores en funciones, José Manuel Albares, aseguró que el zarauztarra había sido secuestrado por las milicias, extremo que repitió el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, el 17 de octubre.

llarramendi residía en el kibutz Kissufim, a apenas dos kilómetros de la franja de Gaza, junto a su mujer, Loren Garcovich, de nacionalidad chilena.

Según el relato publicado entonces por “El Confidencial”, Illarramendi y su esposa «se tuvieron que meter en una habitación de seguridad» y el zarauztarra llamó a sus padres para avisarlos. Sin embargo, cuando la Policía llegó a la vivienda, la pareja no se encontraba en ella y no habría indicios de lucha, «lo que apuntala la teoría del secuestro».

CONCENTRACIÓN EN ZARAUTZ

El alcalde de Zarautz, Xabier Txurruka, convocó ayer la Junta de Portavoces del Ayuntamiento, que aprobó una declaración institucional en la que condena «con rotundidad» el «asesinato del ciudadano de padre zarauztarra y madre getariarra, Iván Illarramendi Saizar, y su pareja, Loren Garcovich, durante el ataque terrorista perpetrado por Hamas el pasado 7 de octubre en el kibutz Kissufim». El Consistorio muestra su «pésame y su solidaridad» con las familias y manifiesta, asimismo, su deseo de que se adopten medidas para «acabar con toda la violencia extrema e insufrible desatada en este conflicto».

Además, convocó una concentración silenciosa para hoy a mediodía con el fin de mostrar su repulsa a estas muertes y su solidaridad con la familia.

El portavoz del Ejecutivo de Lakua, Bingen Zupiria, expresó «la condena más rotunda» por parte del Ejecutivo y quiso ponerse en su lugar de la familia «y sentir como propio el dolor que han sentido durante este mes de incertidumbre».

Ambas muertes invitan «a ponerse en el lugar de las más de 10.000 personas de Gaza e Israel que han perdido la vida» en las últimas semanas, añadió, y pidió a los agentes internacionales que hagan cuanto esté en sus manos para que finalice «esta situación de violencia extrema insufrible» y se puedan «dar pasos hacia la pacificación de ese territorio».

Por su parte, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, trasladó su «afecto» y «pésame» a los familiares de Illarramendi, al tiempo que pidió «trabajar para alcanzar una paz justa y duradera en Oriente Medio».

Asimismo, el coordinador de EH Bildu, Arnaldo Otegi, expresó en un mensaje difundido en la red social X sus condolencias a los familiares y allegados de Illarramendi. «Redoblamos el llamamiento a un alto el fuego, al diálogo y a la negociación», añadió.

El PNV también expresó sus condolencias a los familiares y exigió la liberación inmediata y sin condiciones de las personas secuestradas en el citado ataque.

Al mismo tiempo, rechazó «la indiscriminada ofensiva militar de Israel en Gaza que infringe las normas internacionales y pone en peligro a la población civil gazatí, además de someterla a condiciones inhumanas».

Además, pidió a la ONU, la UE y, en general, a toda la comunidad internacional su «urgente involucración y decidida intervención para detener esta situación, poniendo fin a la masacre de la población de Israel y Palestina».

El secretario general del PSE de Gipuzkoa, José Ignacio Asensio, además de expresar una condena «rotunda y enérgica» por «este asesinato a manos de Hamas», afirmó que «ninguna idea vale una vida y nada, absolutamente nada, justifica la espiral de violencia que se está viviendo en la franja de Gaza».

«Mi rotunda condena por el secuestro primero y asesinato después de Iván Illarramendi y su mujer, y mi afecto y cariño a su familia a la que he trasladado personalmente mis condolencias», indicó el recién elegido presidente del PP en la CAV, Javier de Andrés. El PP pedirá hoy una condena en el Parlamento de Gasteiz.

También el Athletic, club del que había sido socio Illarramendi, lamentó lo ocurrido y reclamó «el cumplimiento y el respeto de los Derechos Humanos, el Derecho Internacional y la construcción de una solución pacífica duradera».



El terror acelera el desplazamiento masivo

Israel aseguró que 50.000 palestinos salieron ayer del norte de la Franja de Gaza rumbo al sur a través de un corredor habilitado por su Ejército. La ONU ya había advertido de que el desplazamiento masivo había aumentado en las últimas horas, después de que el Ejército sionista partiera en dos la Franja y comenzara las operaciones militares en la ciudad de Gaza, ordenando a sus habitantes que se marcharan. La mayoría de los que han acabado por dejar sus hogares, incluidos niños, ancianos y personas con discapacidad, se tienen que mover a pie y con una cantidad mínima de propiedades dada la falta de combustible. Además, tuvieron que cruzar puestos de control israelíes y presenciaron arrestos por parte de las fuerzas sionistas, según la ONU. El 70% de la población gazatí, unos 1,5 millones de personas, ya ha tenido que abandonar sus hogares por los constantes bombardeos israelíes desde hace un mes y con casi la mitad de las viviendas reducidas a escombros. 725.000 han buscado refugio en 149 instalaciones de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (Unrwa), mientras que 122.000 están en hospitales, iglesias y edificios públicos, aunque estos lugares también son bombardeados por la aviación israelí.

El Gobierno de Gaza acusó a la Unrwa de colusión con Israel en el desplazamiento forzado de la población del norte de la Franja. «La Unrwa y sus líderes son responsables de esta catástrofe humanitaria, porque se sometieron desde el primer momento a los dictados de la ocupación, abandonaron sus posiciones y renunciaron a su responsabilidad hacia cientos de miles de habitantes», subrayó. También le reprochó haber «hecho oídos sordos a los gritos de dolor y sufrimiento».

Por otra parte, la Media Luna Roja Palestina denunció los bombardeos israelíes continuados en las inmediaciones del hospital Al Quds, con 500 pacientes y más de 14.000 desplazados internos, que han cortado todos los accesos al centro, objetivo de numerosos ataques durante la última semana.GARA