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Interview
xabier mikel azparren
Corredor del Euskaltel-Euskadi

«El Q36.5 es como un equipo World Tour, pero con licencia Pro Conti»

El donostiarra transmite ilusión a pocos días de comenzar a trabajar con un equipo que da continuidad a buena parte de la estructura del Qhubeka que compitió en el World Tour hasta 2021. Destaca que ha nacido este año, que tiene el futuro asegurado hasta 2029 y que quiere volver a la máxima categoría sin prisas. Le gustaría conocer con él las mejores clásicas.

(SPRINT CYCLING | FUNDACIÓN EUSKADI)

Xabier Mikel Azparren apenas ha estado una semana en casa tras acudir a una concentración de cinco días con la selección española de pista y este domingo se marcha a Calpe para tener la primera toma de contacto con el Q36.5.

¿Tiene previsto alternar la pista con la ruta este año?

La pista me llama la atención, la hago a gusto de forma vocacional, y me gustaría correr las pruebas de la Challenge de pista que hay en Donostia entre las dos concentraciones que tengo con el equipo del 10 al 22 de diciembre y de enero en Calpe. El Europeo de enero estaba dentro de los planes, pero desde hacía tiempo sabía que no podía y se lo comuniqué al seleccionador Félix García Casas y por eso alargué las vacaciones al final de temporada.

Además estaré en las pruebas internacionales de pista de Anoeta en febrero, después de Valencia. Es muy bonito que se celebre una prueba de ese nivel, me hace ilusión correr en casa y no por los puntos UCI, porque ya conseguí el mínimo que necesitaba el año pasado.

A las primeras Copas del Mundo de Australia y Hong Kong me es complicado ir porque tengo la segunda concentración con el equipo y un inicio de temporada en el que haría la mayoría del calendario español. Vamos a hacer un esfuerzo y a ver si puedo estar en la Copa del Mundo de Canadá para iniciar este proyecto de cara a Los Angeles 2028 con la ilusión de intentar clasificar la cuarteta. Este año es más importante hacerme un hueco en mi nuevo equipo lo más rápido posible y estoy muy enfocado en la carretera para ir a la primera concentración y dar un buen nivel.

¿Se plantea correr el Mundial en octubre?

Sería bonito alargar la temporada y llegar allí y ver dónde estamos. Es lo ideal si todo va bien. El papel todo lo aguanta, habrá que ir mes a mes y alargar el punto de forma de la carretera para el Mundial. También habría que hacer el hueco para trabajar con ellos porque es una especialidad que exige mucho, pero salí contento de la concentración. He conocido el grupo de trabajo y la dinámica de la selección, he estado a gusto y estoy ilusionado con este año de muchos cambios en todo. De carretera hemos ido Lluis Mas, que se va a concentrar en la pista y en su equipo, y yo. Raúl García Pierna no ha podido estar en la concentración. Además hay un grupo bonito de jóvenes como Erik Martorell, que siempre da un gran nivel. De la cantidad es más fácil sacar calidad por la rivalidad, que nadie tenga el puesto fijo ayuda a que todos quieran mejorar.

Después de varias temporadas en las que se le ha situado en la órbita del Movistar para pasar al World Tour, al final ha fichado por el Q36.5.

Sí es verdad que con Movistar estuvimos hablando, la relación ha sido muy cercana y es un proyecto bonito, pero creo que soy todavía joven. La de Q36.5 era una opción ilusionante de correr fuera, de conocer una estructura distinta a las de casa. Es una oportunidad de conocer gente de todos los países que hay que aprovecharla porque, siendo ciclista, no conlleva salir fuera de mi ciudad. Estoy muy contento con la decisión que tomé, todo lo que veo del equipo es una pasada. Está muy bien organizado desde la base hasta arriba, trabajan todos de forma precisa, llevan un control muy grande y transmiten la tranquilidad de que ves que se trabaja bien y así se van a conseguir los resultados.

¿Cómo se ha concretado esta opción de un equipo surgido este año tras la desaparición del Qhubeka en 2021 con la ayuda de Vincenzo Nibali?

No tengo representante. Soy atípico. Alex Sans siempre había mostrado interés, nos pusimos en contacto y desde el primer momento conectamos y la relación fue muy buena. Veíamos que entendíamos el ciclismo de forma parecida y eso ayudó a acercar posturas. Entre todas las opciones fue la que más me gustó y tras la Vuelta a Burgos tuve una reunión por videoconferencia con Douglas Ryder, que ya fue el manager del Qhubeka. Estuve una hora hablando con él, la conexión fue muy buena y eso ayudó a que se concretara el fichaje sin complicaciones.

Mucha gente del staff han estado en la estructura del Qhubeka, su forma de trabajar es la misma y por eso son como un equipo World Tour, pero con licencia profesional continental. El conjunto es suizo y además tiene sedes en Holanda y Girona, pero es un proyecto muy internacional que da la oportunidad a ciclistas de todo el mundo. Eso me motivó y empujó a correr con ellos. Dan muchas facilidades.

Este primer año no ha participado en ninguna grande. ¿Aspira a correr alguna en 2024?

En principio no tienen excesiva prisa por correr una grande. Es un equipo que busca hacer las cosas bien paso a paso y quieren ir para 2025 con un líder más sólido que les pueda ayuda a estar arriba en la general y completar una bonita vuelta. El equipo quiere ir ya a hacerlo bien en la carrera, no con un rol secundario. No tienen prisa y eso me ha gustado. Se dan el tiempo necesario al ser un proyecto de futuro.

El patrocinador Q36.5 es una marca de ropa ciclista con la que Mikel Colino tenía una tienda en Donostia y la conozco desde hace tiempo porque en ella estuvo trabajando mi padre. Es bonito acabar con ellos. He firmado por un año, pero si todo va bien espero alargar la relación porque es un equipo que me gusta. Tienen asegurado el proyecto a largo plazo hasta 2029. No tienen prisa porque quieren subir al World Tour haciéndolo bien y todo lo hacen muy bien.

Con 27 corredores, siete más que Euskaltel, tendrá un calendario mayor y diferente...

Este primer año han tenido mucho calendario y al final iban a las carreras con cinco o seis corredores y por eso han querido tener una mayor cantidad, como si fuera un World Tour. Con Euskaltel estaba todo más limitado y el calendario el año pasado fue un pelín justito para mi gusto. El primero fue el que más corrí y cada temporada he ido bajando la cantidad de días. Yo soy un corredor que coge la forma corriendo carreras y fue un poco limitante. Aunque en el principio de temporada arranqué muy bien, me costaba tener continuidad porque había períodos largos sin correr.

¿Cómo valora los tres años en Euskaltel, donde ha corrido con su hermano Enekoitz?

Lo hablé con ellos. Creía que era el momento de dar este paso para intentar crecer, pero si en un futuro todo va bien en el Euskaltel y el proyecto sigue para arriba estaré encantado de volver y hacer cosas bonitas con ellos. ¿Qué mejor que correr en casa? Ha sido el equipo que me dio la oportunidad de pasar a profesionales, de correr con mi hermano, de disputar dos Vueltas, la Itzulia, la Klasikoa... Me ha convertido en el ciclista que soy y estoy muy agradecido. Ha sido recíproco. Me han dado mucho y creo que he aportado bastante al equipo. De sus pocas victorias alguna es mía, he logrado un podio en el campeonato de España, puestos de honor, he tenido repercusión en carrera... Ha estado igualado. Tanto ellos como yo hemos dado el máximo el uno para el otro.

¿Qué calendario tendrá y qué pruebas nuevas le gustaría conocer con el Q36.5?

Si nos invitan a Arabia Saudí empezaría allí. No sé todavía el calendario, nos lo van a decir en la primera concentración. Están por confirmar las invitaciones y quiénes van a ser los corredores para las vueltas y para las clásicas. Yo voy a ser el corredor bisagra entre los dos equipos porque me amoldo bien y me gusta ir al mayor número de carreras. Me haría mucha ilusión correr Milán San Remo, en un futuro el Giro, las clásicas del Norte, Flandes, Roubaix, Tirreno... Estas pruebas me ilusionan mucho. Me cuesta decidirme porque cada nueva carrera la disfruto un montón. Al no hacer las grandes, como compensación será invitado a casi todas las vueltas del World Tour, menos la Itzulia, porque tampoco tenemos corredores para una prueba así.

¿Qué objetivos se marca?

Dar pasos en las cronos y en las vueltas de una semana y aportar al equipo lo máximo. Tenemos buenos sprinters como Nizzolo y Moschetti e intentaré ayudar a conseguir victorias, hacerme un sitio en ese bloque que trabaje las llegadas y aprovechar mis oportunidades. El equipo se ha formado alrededor de Nizzolo y Moschetti y además tenemos a Damien Howson y Gianluca Brambilla. Tuve la suerte de coincidir con él y fue muy cercano conmigo. Compartir equipo con corredores de este nivel es muy importante.