Saski Baskonia no gana en el Mediolanum Forum desde 2020 y ayer tampoco fue una excepción. Llegó a ir con 24 puntos de desventaja y Armani Milano sufrió quizás más de la cuenta porque se vio ganador con todavía más de 15 minutos por disputarse.

Pero en el peor día de Markus Howard de toda la temporada, con un Baskonia que sumó un 3 de 17 en triples y perdió 16 balones, muchos de ellos en primera línea, los de Dusko Ivanovic solo arrancaron una oportunidad de remontar cuando le dio por defender y ante un rival que, repleto de bajas, echó mano de Flaccadori, Nicolo MNelli y sobre todo, el exbaskonista Johannes Voigtmann para infligir la octava derrota de la campaña a Saski Baskonia, sabiendo lucirse y sabiendo sufrir. Y lo que es peor, dejando una sensación desagradable entre los alaveses en este último partido de la primera vuelta de la Fase Regular.

OPOSICIÓN Y TOTAL

El inicio baskonista no pudo ser peor. Johannes Voigtmann parece otro desde la medalla de oro del pasado Mundial, y suyos fueron los cinco primeros puntos del partido y la primera asistencia para Flaccadori. Un Flaccadori que, pese a no ser más que un base de rotación, ante las ausencias de Ricci, Mirotic o Shields, entre otros, volvió locos a los armadores gasteiztarras en este inicio.

Cierto es que Saski Baskonia raras veces firma un 1 de 11 en triples en los 20 primeros minutos, pero a ese desacierto desde la lejanía hubo que sumarle hasta 9 pérdidas en toda la primera mitad, de forma que Armani Milano pudo jugar por momentos a placer.

Las reacciones del Baskonia en este arranque fueron sincopadas. Ahora unas canasta de Sedekerskis porque Chiozza encadenó dos asistencias; ahora un par de buenas canastas de Marinkovic desde la media distancia -al más puro estilo de los aleros de los tardíos 80, que aún recelaban del tiro de tres- y un par de acciones de Chima Moneke.

MUERTE Y RESURRECCIÓN

Anoche volvía a debutar Matt Costello, pero como es usual en él cuando no anda sobrado de confianza, fió su aportación al triple y el acierto no terminaba de llegarle. En cambio, Nicolo Melli realizó un segundo cuarto de libro, haciendo gala de sus artes baloncestísticas así en el poste bajo como desde la lejanía.

Después de dejar el duelo al descanso con un 46-31 tan inesperado como indeseado, parcial de 11-2 para Armani Milano para inaugurar el tercer asalto, con el añadido de una tercera falta de Markus Howard por una antideportiva sobre Hines. Si no quieres caldo... ¡toma dos tazas!

Y justo ahí llegó la reacción baskonista. Armani Milano se vio vencedor y encajó un parcial de 3-15 y ya en el último cuarto, los gasteiztarras se arrimaron hasta el 67-57.

Armani Milano, pese a dejarse varios tiros libres, logró sacar el ritmo anotador a los gasteiztarras, en acciones muy dudosas, mientras que Poythress y Voigtmann, este con un mate que tuvo el añadido de una peligrosa falta de Costello, le pusieron el sello a un partido que el Baskonia no podía dejar escapar.