Ane URKIRI ANSOLA
ALAVÉS

Victoria estratégica para abrir brecha con el descenso

Los albiazules superaron al Cádiz con un gol de Luis Rioja desde el punto de penalti que le permite tener un colchón de ocho puntos con el descenso. Además, es la primera vez que el Glorioso suma dos victorias de forma consecutiva.

Los jugadores albiazules celebran el gol de Luis Rioja, que a la postre fue el decisivo para el triunfo.
Los jugadores albiazules celebran el gol de Luis Rioja, que a la postre fue el decisivo para el triunfo. (Jaizki FONTANEDA | FOKU)

Victoria de oxígeno para un Alavés que, a pesar de su eliminatoria copera, ha comenzado el año con buen pie. Un empate -frente a la Real en Anoeta- y dos victorias consecutivas trazan la trayectoria sobresaliente de los de Luis García Plaza, que han superado a dos rivales directos como Sevilla y Cádiz en las dos últimas jornadas. Los siete puntos de nueve posibles en lo que vamos de 2024 permiten al Glorioso abrir una significante brecha respecto al descenso, y es que el colchón de ocho puntos sabe muy bien en el seno de la familia albiazul.

Alavés y Cádiz ofrecieron un duelo de lo más disputado, sobre todo en la primera mitad, en la que ocurrieron cosas en las dos áreas. Más peligro generó el equipo local -Guridi estrelló un lanzamiento en el larguero, en la ocasión más clara del primer tiempo, en el minuto 3- pero le faltó más mordiente en los últimos metros. Antonio Blanco -que también fue titular en San Mamés en el partido copero- y Guevara, en la sala de máquinas, no fueron tan clarividentes como acostumbran y el juego acusó esa falta de fluidez. Repitió Carlos Vicente en el once titular y fue el encargado de poner en juego las jugadas de estrategia, que no surtieron demasiado peligro.

El Cádiz, por su parte, aunque no puso a prueba a Sivera, merodeó en el área rival. Ramos, en dos ocasiones, y Escalante, en otra jugada, estuvieron lejos de atinar entre los tres palos.

BUENA GESTIÓN DEL MARCADOR

Las ocasiones más claras de los gaditanos llegaron una vez que se vieron abajo en el marcador. Nada más comenzar el segundo tiempo, un penalti bastante infantil de Alejo a Kike García -también empezó desde el inicio para dar descanso a un Samu Omorodion que rozó el 0-2 en dos ocasiones-, cuando el ariete ya había cedido el balón, convirtió Luis Rioja con un disparo raso desde los once metros.

El Glorioso supo manejarse con la ventaja en el marcador, consciente de su superioridad, pues el Cádiz, en puestos de descenso y con tan solo dos victorias hasta la fecha, apenas tuvo dos destellos. Dos destellos que bien pudieron cambiar el resultado, pero Chris Ramos, primero con la cabeza y después en el mano a mano con Sivera, estuvo desacertado en el tino. En parte por culpa de la buena reacción de Rafa Marín, que completó un partido digno en el eje de la zaga junto a Ruben Duarte para así poder sumar, por primera vez esta temporada, la segunda victoria consecutiva.