La 14ª jornada de la Liga F ya empezó bien el sábado, con la solvente victoria de la Real ante el Levante Las Planas, y Athletic y, sobre todo, Eibar le dieron el remate ayer. Las rojiblancas prolongaron su buena racha de resultados, sin que el juego acompañase demasiado esta vez, y el equipo guipuzcoano, que había comenzado el año perdiendo precisamente en Lezama, se reencontró con el triunfo para así celebrar el tercero consecutivo en Ipurua.

Fue una jornada redonda para el Eibar: se sitúa a un solo punto del Valencia, alcanza al Betis que perdió el sábado y con el que tiene el golaverage a favor -cerró 2023 precisamente imponiéndose al equipo verdiblanco en Ipurua- y se aleja del Villarreal y del Granada, que sigue marcando la frontera del descenso tras haber caído en su duelo directo con el Sporting de Huelva.

Empezó igualado el partido, con los dos equipos buscando la portería rival y con intercambio de balones a la madera. Lo hacía primero Laura Camino, con un chutazo desde 30 metros que se estrellaba en el larguero y respondía el Valencia con un centro de Kerlly que se iba envenenando hasta dar en la cruceta. Las ocasiones también llegaban por abajo, con intentos de Fiamma y Ane Campos.

El Eibar entró mejor al campo en la segunda parte. Cada vez más cómodo, fue ganando metros y Espe Pizarro lo premió con un chutazo desde el semicírculo del área que colocó el 1-0 en el marcador. Se rebeló el Valencia, que fue metiendo dinamita, y tocó sufrir. Fiamma cabeceó una falta a la cruceta y Miralles se lució con dos paradas consecutivas ante Anita Marcos y María Molina. Las eibarresas reaccionaron al menos para convertir la recta final en un toma y daca pero tampoco sus contragolpes encontraron puerta.

SOBRE LA CAMPANA

Hubo golazo en Ipurua y también en Adeje, en este caso a cargo de Nerea Nevado para rescatar un punto para un Athletic que lo mereció a duras penas.

Las rojiblancas quisieron hacerse con la pelota y lo consiguieron durante los primeros minutos ante un Tenerife que cerraba bien atrás y amenazaba a la contra y que conforme pasó el tiempo se sintió más cómodo hasta acabar por adueñarse del partido. Las ocasiones no fueron demasiado claras pero la sensación de peligro en las inmediaciones de Nanclares era constante, al contrario de lo que sucedía al otro lado del campo.

Hubo que esperar a la reanudación para que el Athletic firmara su primera ocasión, un balón que Mariana remató al primer palo. Las canarias debieron picarse porque su gol llegó poco después, al cabecear una falta Thais, sola en el corazón del área.

Aznar echó mano del banquillo en busca de pólvora aunque todavía tardó un rato en llegar la reacción de su equipo y el golazo de Nerea Nevado, un centro-chut que se estrelló en la cruceta opuesta antes de entrar. No le gustó a su rival, que volvió a apretar aunque la expulsión postrera de Clau Blanco frenó su brío.