Imanol Pradales toma el testigo para liderar «una nueva transformación»

El ya candidato del PNV a la Lehendakaritza, Imanol Pradales, se presentó ayer en Durango ante la parroquia jelkide dispuesto a liderar «una nueva transformación» y confiado en que, en la actual coyuntura en el Estado español, es posible «lograr más y mejor autogobierno para que Euskadi sea dueña de su propio destino». La mejora de la sanidad pública será su «máxima prioridad».

Puesta de largo del PNV con vistas a las próximas elecciones al Parlamento de Gasteiz, con la presentación del aspirante a suceder a Iñigo Urkullu y llamamiento a la militancia a activarse de cara a una cita con las urnas que aún no tiene fecha. Tras ser refrendada su candidatura por la Asamblea Nacional extraordinaria celebrada en Landako gunea, Imanol Pradales se presentó dispuesto a liderar «una nueva transformación», en la que su «máxima prioridad» será la mejora de la sanidad pública.

Pradales no ocultó el «gran orgullo» que supone para él haber sido elegido para suceder a quien fue su maestro en la ikastola y se comprometió ante la militancia a «luchar por lograr más y mejor autogobierno para que Euskadi sea dueña de su propio destino. Una Euskadi libre, de mujeres y hombres libres». Para el santurtziarra, «la geometría política del Estado ha abierto una ventana de oportunidad» para alcanzar ese objetivo.

«Somos un pueblo pequeño, sin recursos naturales. Hemos avanzado mucho. Pero aún debemos acercarnos más a los mejores», aseveró tras señalar que cree «en una Euskadi libre construida desde la voluntad libremente expresada por quienes aquí vivimos. Nuestro nivel de libertad -subrayó- no se habría alcanzado sin el PNV, sin el esfuerzo y sacrificio de quienes nos precedieron».

Antes, dijo apostar por «una Euskadi referente de estabilidad, que despliegue toda su potencia política en el plano europeo e internacional». «Una Euskadi del Bienestar, con alma y voz propia en el mundo. Una Euskadi libre construida desde la voluntad libremente expresada por quienes aquí vivimos», añadió el candidato, que en varios compases de su intervención incidió en sus orígenes humildes. «Provengo de una familia humilde de Mamariga, un barrio obrero de Santurtzi. Mis abuelos por parte de aita y mis bisabuelos por parte de ama, llegaron desde Burgos a principios del siglo XX en busca de un futuro mejor», se presentó.

«NADIE NOS VA A REGALAR NADA»

Pradales demandó el apoyo de la militancia y se comprometió a «no defraudar» y a «dar lo mejor de mí mismo, desde la responsabilidad, la humildad y el amor por Euskadi». «Nadie nos va a regalar nada. Soñar sí. Trabajar también. Yo os prometo trabajo y dedicación, en cuerpo y alma. Y os necesito bogando conmigo en la trainera», en referencia a su pasado como remero de la Sotera. «No bajar nunca los brazos. Nunca. ¡Porque no bajar los brazos es el secreto para poder levantar los remos al ganar la bandera de la libertad de Euskadi!», enfatizó

«Os necesito», dijo para bogar en la tripulación que está dispuesto a liderar, huyendo de «populismos de izquierdas y de derechas». Sostuvo que «ponen en cuestión los valores de la democracia y se retroalimentan en el peligroso juego de la polarización política desde los extremos».

«No caigamos en la trampa populista. Los problemas complejos no se resuelven con respuestas simples. Toca hacer y reivindicar la política con mayúsculas. Fortalecer nuestras instituciones y nuestra comunidad política. Toca huir de la inestabilidad populista. Tejer red y nuevas alianzas en Europa y en el mundo que defiendan nuestros intereses. Y hacerlo desde el respeto a la voluntad mayoritaria del Pueblo Vasco, desde la defensa de los valores democráticos y la lucha por la justicia social ponen en cuestión los valores de la democracia», defendió el aspirante a lehendakari.

Pidió rebelarse «contra los agoreros. Contra los que dicen que todo está mal. Que todo es decadente. Y que todo va a estar peor. ¿Por qué? ¿Por qué? ¡Pues no! Vamos a lograr una Euskadi mejor», prometió.

SANIDAD Y CUIDADOS

Imanol Pradales efectuó un repaso a los retos que, en su opinión, se enfrenta la sociedad vasca y destacó que la sanidad será su «máxima prioridad», ya que admitió que la red pública, como sucede en otros lugares, está tensionada por la pandemia. En esa tarea destacó la importancia de «hacerlo junto con las y los profesionales» de Osakidetza.

Además, estimó que toca abordar los cuidados sociosanitarios «para hacer frente a una Euskadi más envejecida, sin que el peso recaiga sistemáticamente sobre las mujeres». «Bienestar es saber que ama -quien tuvo cierto protagonismo al inicio de su presentación- tendrá los mejores cuidados cuando los necesite».

«La creación de riqueza y empleo de calidad» será otra de sus grandes prioridades, manifestando su firme apuesta por «nuevas industrias y una nueva economía descarbonizada, más sostenible, verde y digital». «Si hoy tenemos las pensiones y los salarios más altos del Estado es gracias a nuestro pasado y presente industrial», apostilló.

Igualmente, el candidato jeltzale, que fue profesor universitario antes de acceder a cargos públicos, se comprometió con una «educación de excelencia» como la base para «crear ciencia, talento y futuro», y para ello desplegará «todo el potencial» de la nueva Ley de Educación. Todo ello sin olvidar su más firme compromiso con la igualdad de mujeres y hombres, la emancipación juvenil, las políticas de vivienda y la seguridad.

Ortuzar: «Nos quieren nerviosos»

El presidente del PNV, Andoni Ortuzar, pidió ayer a su militancia que se movilice ante la próxima cita con las urnas, ya que aunque no tiene dudas de que «vamos a ganar las elecciones, la cuestión es por cuánto. Es ahí donde debemos hacer hincapié. Se debe notar la diferencia». En su opinión, sus oponentes «nos quieren ver nerviosos», por lo que pidió a los jeltzales que no dejen manipular.

Ortuzar, que le tocó ejercer de «telonero» en el acto celebrado en Landako gunea de Durango, dedicó su intervención a «arengar» a su parroquia para que hagan gala «de compromiso militante». «La diferencia se tiene que notar. Sé que no vais a fallar, porque no podemos fallarle a Euskadi», dijo.

«Mañana unos dirán que el PNV se apunta al continuismo y otros que apostamos por la ruptura. Unos definirán nuestro discurso como neoliberal y los otros nos verán entregados al social-comunismo. Les molesta nuestra capacidad de adaptación. Ni parálisis ni revolución: lo nuestro es la evolución. Evolución a mejor», sostuvo.

«Nos quieren ver nerviosos, con dudas», afirmó el burukide, quien dirigiéndose a sus afiliados dijo estar seguro que no iban a caer en la «trampa». «En esta política evanescente que impera ahora, la verdad da igual. Una mentira sucede a otra y aquí no pasa nada. Son gente populista, que promueve la inestabilidad porque está más cómoda», subrayó. «No podemos dejar que nos manipulen, pero tampoco podemos caer en sus mismas técnicas. Somos el PNV y hacemos las cosas de manera diferente»,añadió.

«Siempre de cara, con nuestros equipos, con nuestras propuestas para mejorar Euskadi, siempre en positivo, con la mano tendida. Siempre buscando y garantizando la estabilidad. Sin caer en provocaciones», insistió. A.G.