A menudo hablamos de la desindustrialización de la Margen Izquierda como si nos refiriéramos a un fenómeno natural; como si fuera la inevitable realidad económica que el destino le depara a nuestra comarca. Todo lo contrario. Somos conscientes de que hemos llegado a esta situación desoladora por la estrategia desindustrializadora impuesta por las élites económicas y los partidos políticos a su servicio. Como denunciábamos en el contexto de crisis económica de 2008, la Margen Izquierda es una de las comarcas más precarizadas de Euskal Herria. Tras 15 largos años, la situación, lejos de mejorar, ha ido a peor.

El modelo socioeconómico actual es una clara consecuencia del proceso diseñado por PNV y PSOE en las últimas décadas del siglo XX. El desmantelamiento industrial de la época abrió el camino a la terciarización de la economía y a la apuesta por los grandes centros comerciales, generando muchos y diversos impactos en nuestra economía: precariedad, temporalidad, jornadas parciales, estatalización de convenios, desaparición del comercio local, etc. Hemos pasado del pleno empleo a las tasas de paro más altas en poco tiempo, de ser el epicentro económico a convertirnos en la periferia. Pese a todo ello, se sigue profundizando en un modelo que empobrece nuestra región, ya que recientemente hemos visto cómo se recalifican terrenos industriales para construir supermercados (Cosco) o almacenes (Amazon). Tenemos claro que Ezkerraldea no es el parque logístico de nadie. No somos el MegaPark de los grandes almacenes; somos un territorio que quiere desarrollar vidas dignas en nuestra propia comarca.

La Margen Izquierda, por tanto, no puede entenderse sin un proceso de industrialización; al mismo tiempo, no se puede entender la Margen Izquierda sin lucha obrera, porque la lucha de clases está inserta en nuestro ADN desde que nacimos como eskualde. El Valle de Somorrostro, nuestra comarca histórica, dio nacimiento en el siglo XIX a las comarcas conocidas con el nombre de Zona Minera y Margen Izquierda debido al proceso de industrialización. Junto a la extracción y exportación masiva del mineral de hierro de Somorrostro, se produjo una rápida industrialización mediante la instalación de fábricas siderometalúrgicas y navales en la margen izquierda del río Ibaizabal-Nervión. Con la explotación masiva de las minas y la creación de las fábricas nació la clase obrera, y con ella la lucha obrera. Somos, pues, una región que desde su nacimiento ha luchado por unas condiciones laborales y de vida dignas, somos clase y lucha obrera.

La conciencia obrera recorre de arriba abajo la identidad de la Margen Izquierda. La lucha de los y las trabajadoras es y será la fuerza que ha traccionado todos los tiempos de nuestra Historia. No estamos hablando del pasado, sino del presente y del futuro. Un claro ejemplo de ello es el ciclo de movilizaciones, protestas y huelgas de los y las trabajadoras de Amazon situado en Trapagaran. Es tan paradójico como esperanzador saber que donde estaba la fábrica de calderas Babcock & Wilcox, hoy las huelgas y movilizaciones de Amazon son ejemplo de dignidad y lucha. Los y las trabajadoras de ese centro logístico lo tienen claro: sin lucha, no hay derechos.

Los y las militantes de la izquierda abertzale asumimos las reivindicaciones de las diferentes empresas de la comarca que están en lucha, y nos reafirmamos con todas ellas en el compromiso de construir la Margen Izquierda de mañana. Entre estas reivindicaciones cobra especial importancia la necesidad de una propuesta integral de reindustrialización de la zona. Ante la falta de voluntad institucional para dar respuesta a esta urgencia, EH Bildu puso en marcha el proceso “Ezkerraldea Gara”, el mayor ejercicio de escucha y de propuestas que se ha realizado en la comarca en años. Fruto de este proceso en el que han participado más de doscientos agentes sociales es el Plan Estratégico “Ezkerraldea 2030”, un plan integral que recoge la reconstrucción del modelo socioeconómico comarcal y la propuesta de otro modelo político. De nuevo, el independentismo de izquierda es la llave para el cambio que necesita la región, y su crecimiento social y electoral es la muestra más nítida de ello. Es hora de disputar la hegemonía a los de siempre y poner en marcha un modelo de gobernanza comunitaria basado en el poder popular, también en la Margen Izquierda.

Decir por último que para alcanzar la Margen Izquierda que soñamos será imprescindible la activación de todas nuestras fuerzas políticas, sociales y sindicales. Como decíamos, sin lucha no conseguiremos la Ezkerraldea de mañana ni una Euskal Herria libre, socialista y feminista. Por todo esto, el 17 de marzo los miembros de la izquierda abertzale estaremos en la manifestación convocada por LAB en Sestao en defensa de los puestos de trabajo y a favor de vidas dignas. En definitiva, por un presente y un futuro para Ezkerraldea.

Gora langileon borroka! Gora Ezkerraldea!