Los hermanos Williams sueñan con emular a los Salinas

Al igual que en 1984, último año en el que se alzó la Copa en Bilbo, el Athletic cuenta en su actual plantilla con dos hermanos. Iñaki y Nico Williams quieren escribir su historia en rojiblanco, como lo hicieron Julio y Patxi Salinas. La afición de los leones lleva 40 años esperando para volver a sacar la Gabarra y encuentra paralelismos para creer en que se puede repetir la hazaña.

La diferencia radica en que los Salinas eran dos jóvenes que se estaban abriendo paso en el fútbol profesional, mientras los Williams son dos jugadores contrastados, cuya endiablada velocidad en punta les convierte en un auténtico quebradero de cabeza para los rivales y son la base en la que se apoya el juego de ataque rojiblanco.

No en vano, Iñaki lleva 11 goles entre Liga y Copa, y suma cinco asistencias en todas las competiciones. Su hermano pequeño es el máximo asistente del equipo tras participar en 12 tantos y ha marcado seis goles. Nico se perdió el choque de la última jornada en el Bernabéu por una sobrecarga muscular, pero se espera que pueda estar recuperado para disputar de inicio la final.

Hijos de una pareja de migrantes de Ghana que llegaron a Euskal Herria gracias a un sacerdote, su historia personal de superación familiar añade un aliciente más a su desempeño en el campo. Iñaki nació en Bilbo y le pusieron su nombre en agradecimiento al citado cura. Nico es de Iruñea, donde la familia se instaló y residió en una infancia llena de dificultades.

Iñaki habló ante la prensa en los días previos a la final de Copa y destacó que está viviendo el sueño que tenía de crío al compartir la camiseta y poder pelear por una Copa junto a su hermano. «Hemos crecido jugando juntos», recordó, recalcando que le gustaría dedicar el trofeo a sus progenitores, además de «a todas las generaciones que no han visto al Athletic campeón».

Los Williams han firmado este curso noches memorables en San Mamés, con goles y jugadas decisivas. La eliminatoria contra el Barcelo- na fue digna de un guión de película, con Iñaki llegando desde la Copa África en un vuelo de última hora y marcando en la prórroga.

TRIUNFOS Y DERROTAS

El nueve rojiblanco ha salido derrotado en tres finales de Copa, mientras que será la primera para Nico. Sin embargo, ambos disputaron la final de la Supercopa en 2022. Iñaki fue titular y su hermano pequeño salió en la segunda mitad con el marcador en contra. No hubo manera de remontar ante el Real Madrid. En cambio, en 2021 fue decisivo en el triunfo de otra Supercopa y también formó parte del equipo que ganó el mismo título en 2015.

Iñaki rememoró que «ya nos ha tocado perder finales» y admitió que «en la vida se pierde más que se gana». En este sentido, aseguró que «hemos dado una lección al mundo del fútbol» al levantarse después de caer en las semifinales de Copa de las últimas temporadas. Así, mencionó la eliminación contra Osasuna, en la que su hermano Nico desperdició varias ocasiones claras y el aprendizaje que supuso para el joven futbolista.

Por ello, Iñaki no cree que el Athletic vaya a saltar a La Cartuja con «miedo a perder» y sí aplicando su estilo de juego, presionando arriba y haciendo transiciones rápidas. Entiende que esa experiencia le debe servir a su equipo para encarar la final «con valentía». Según consideró, el conjunto rojiblanco «atraviesa un estado de forma muy bueno, con muchos jugadores a muy buen nivel. Muy pocos equipos nos han pintado la cara y esa confianza en lo que hacemos nos da tranquilidad».