JUL. 29 2024 ¿LA ÚLTIMA FINAL OLÍMPICA DE CHOURRAUT? La maldita segunda puerta frena el arte de una Chourraut «agradecida» Un mal inicio en la final, una sanción de 50 segundos en la puerta 2, privó a Maialen Chourraut de luchar por las medallas en los Juegos Olímpicos de París. La palista de Lasarte-Oria fue la segunda en liza y un error tan tempranero fue su condena en la que pudo ser su última final olímpica tras un oro, una plata y un bronce. A la guipuzcoana le queda la baza de kayak cross. Maialen Chourraut, con la mirada fija en el objetivo, a pesar del fallo inicial. (Álvaro DÍAZ | EUROPA PRESS) Ane URKIRI ANSOLA PARIS Se hace el silencio, Maialen Chourraut se lleva las mano a la cabeza... Ricarda Funk acaba de fallar en la puerta 20. «En mi opinión, sí que ha pasado por la puerta», dice una Chourraut aturdida por el error de la campeona olímpica en Tokio 2020. Su dolor y su pesar por la alemana se hizo notar en la zona mixta del canal Vaires-sur-Marne, olvidándose por un momento de su recorrido fallido. Las mejores también fallan y para muestra está la clasificación final de París 2024, en la que las dos mejores de Tokio acabaron en penúltimo y último puesto. A Maialen Chourraut se le atravesó la segunda puerta durante todo el campeonato. Tocó el metal tanto en la segunda bajada de la eliminatoria previa como en la semifinal para terminar de fallar totalmente en la gran final, en la que la lasartearra nos tenía acostumbrados a que sacara su magia. Esta vez no le salió el truco final, después de hacerse de la manera más milagrosa con un hueco en la batalla decisiva, con un undécimo puesto de entre doce plazas. Con todo, tuvo que lidiar la final desde la segunda posición en la línea de salida, con la esperanza de que su tiempo fuese la referencia para las rivales. Sin embargo, se esfumó toda ilusión y esperanza en las primeras paladas, cuando Chourraut perdió el equilibrio y no llegó a pasar la segunda puerta -recibiendo una sanción de 50 segundos-, una maldita segunda puerta que se le ha atravesado incluso en los entrenamientos, tal y como ella misma admitió en zona mixta: «Si os digo la verdad, ni en los entrenamientos he logrado una buena maniobra en esa puerta. No tiene nada complicado, pero se me ha atravesado y no sé por qué». La mente es así de caprichosa y Chourraut es consciente de ello, aunque intentara partir de cero en cada una de las bajadas. «Yo estaba segura de que me iba a salir, pero no ha sido así -sonríe-. Así es el deporte. Este deporte tiene mucho de arte y las cosas más sencillas pueden terminar por complicarse», dijo tajante pero visiblemente apenada tras terminar la final con un tiempo de 157.67 segundos, condenada por esa sanción inicial de 50 segundos además de otros dos por tocar la séptima puerta. Buscaba palabras positivas, de alivio, para tratar de convencer a ella misma todo lo que había logrado, pero su cara decía todo lo contario, con los ojos llorosos y con una media sonrisa en la que costaba encontrar a una Chourraut satisfecha. «He dado lo mejor de mí, puede salir o no, y hoy no me ha salido», indicó, asegurando que su navegación no consiste en tomar riesgos. «ESPECTÁCULO» No quitó los ojos de la pantalla en toda su trayectoria por la zona mixta, en la que atendió a decenas de medios, tanto audiovisuales como de prensa escrita. Fue entonces cuando estaban por bajar las dos mejores de la semifinal, Klaudia Zwolinska -ganadora de la presea de plata- y Ricarda Funk, campeona olímpica en Tokio, que tenían como referencia todos los tiempos con una clasificación temporal que lideraba Jessica Fox, la ganadora final. Tras el error de Funk, terminó por decidirse el podium, y Chourraut, decidida a apurar hasta el final su experiencia olímpica -los de París serán probablemente sus últimos Juegos Olímpicos-, no quiso perder detalle «de la familia» formada en el piragüismo eslalom. «Estoy agradecida por poder estar aquí, rodeada de estas deportistas que están dando un espectáculo impresionante. Me parece alucinante el nivel que están mostrando, también la afición, que debería ser modelo para otras disciplinas. Animan a todas las deportistas, sin excluir, con la firme idea de que gane la mejor. Es una gozada ser parte de esta familia», analizó una Maialen Chourraut que recibió una más que merecida ovación al concluir su recorrido. La de Lasarte-Oria juntó los brazos como queriendo pedir perdón, pero aclaró después que su mensaje era de máximo agradecimiento. «Agradecer a toda la afición por el constante apoyo durante todos estos años y también por disfrutar del piragüismo. No tengo nada más que ofrecer, nada más», incidió, como dejando caer que París 2024 puede ser última gran parada como piragüista profesional. La estancia en la capital francesa, sin embargo, no ha terminado para la triple medallista olímpica, una de las deportistas vascas más laureadas, y es que este viernes, 2 de agosto, comenzará su aventura en el kayak cross, disciplina que le ilusiona sobremanera y una de las razones por las que luchó por estar en sus quintos Juegos. Cara en Tahití, cruz bajo la Torre Eiffel Ayer por la mañana nos despertamos con las buenas noticias que nos llegaban desde Tahití, con la clasificación directa a la tercera ronda de Nadia Erostarbe y Joan Duru, que competirán en la madrugada de hoy a mañana -horario de Euskal Herria- en busca de un hueco en los cuartos de final de los Juegos Olímpicos. La zarauztarra se impuso en la manga siete de la primera ronda, con una puntuación de 13.83, superando a sus rivales con una clara ventaja. Del mismo modo, el baionarra también avanzó directamente al superar en la primera eliminatoria a Robinson y McGillivray. Buenas noticias desde la Polinesia francesa y malas desde el centro de París, con la eliminación de la judoca Ariane Toro en la primera ronda. La navarra, que aspiraba a más a pesar de su juventud, fue superada por la mongola Sosorbaram Lkhagvasuren por ippon.GARA JESSICA FOXLa australiana Jessica Fox, a la que se le resistía el oro en K1 -ganó sendos bronces en Tokio y Londres y plata en Río- ganó al fin la presea dorada, que suma a la lograda en C1 en los anteriores JJOO. La polaca Klaudia Zwolinska y la inglesa Kimberley Woods completaron el podio.