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La primera ministra de Bangladesh dimite y huye tras las protestas

La primera ministra de Bangladesh, Sheikh Hasina, aterrizó ayer en India tras huir del país que ha gobernado durante 15 años. Los militares anunciaron un «Gobierno provisional» tras más de un mes de protestas estudiantiles que han dejado al menos 300 fallecidos.

Manifestantes irrumpieron en la residencia oficial de la primera ministras tras conocerse su huida a India. (K MASAD | AFP)

Sheikh Hasina, figura central de la política de Bangladesh en el último medio siglo y la gobernante más veterana del sur de Asia, dimitió ayer como primera ministra después de cuatro mandatos -los tres últimos consecutivos-, tras un mes de masivas protestas estudiantiles que han dejado cerca de 300 muertos.

A pesar del toque de queda impuesto por el Gobierno, miles de personas se habían congregado frente a su residencia oficial en la capital bengalí. Tras hacerse pública la noticia de la huida de Sheikh Hasina a Agartala, en el noreste de India, muchos de los manifetantes entraron al edificio.

Alrededor de 56 personas murieron en las protestas. «La situación es anárquica, estamos recibiendo muchas noticias de incendios, pero no podemos acercarnos debido a las multitudes», aseguró a Efe Shah Jahan Sikder, portavoz de los bomberos de Dacca.

Las protestas estudiantiles comenzaron para exigir el fin de unas cuotas al empleo público que consideran discriminatorias en uno de los países más pobres del mundo, pero acabaron exigiendo la dimisión de la primera ministra y de su Ejecutivo tras la muerte de los manifestantes.

Hija del primer presidente y fundador de Bangladesh, Sheikh Mujibur Rahman, había iniciado el pasado enero su quinto mandato al frente del Gobierno tras una victoria aplastante de su partido, la Liga Awami, en las elecciones generales del 7 de enero, en las que obtuvo 223 de los 299 escaños en juego.

La trayectoria de la ex primera ministra, de 76 años, estuvo marcada inicialmente por la muerte de su padre, en 1975, durante un golpe de Estado en el que falleció buena parte de su familia. Sheikh Hasina se convirtió entonces en la heredera del fuerte capital político de su padre, protagonista en la guerra independencia frente a Pakistán, en la que también participó la ex primera ministra, quien desde su exilio en Nueva Delhi, forjó una red de seguidores.

Sus años como jefa del Ejecutivo coincidieron con un auge económico del país y la reducción de la pobreza, que rondaba el 12% en 2010 y decreció hasta el 5% en 2022, según el Banco Mundial.

Sheikh Hasina también gozaba de prestigio en el ámbito internacional por su decisión de dar refugio a más de un millón de rohinyás, incluyendo unos 774.000 que huyeron en 2017 de una ofensiva del Ejército de Myanmar.

Sin embargo, sus críticos denuncian sus tendencias autoritarias, graves abusos de los derechos humanos, ejecuciones extrajudiciales y desapariciones forzosas.