Punto sufrido y trabajado para «romper el hielo»
El Glorioso empató sin goles con el Betis en un partido que tuvo dos tiempos distintos: los albiazules crearon más peligro en la primera mitad y fueron sometidos por los andaluces en la segunda, con un Sivera grandioso para sumar el primer punto.
«Viendo cómo hemos acabado, el punto es positivo. Sabíamos de la importancia de este partido, queríamos romper el hielo y conseguir la primera victoria. No ha podido ser, por lo que el punto está bien; estamos satisfechos con el empate», declaró un Antonio Sivera que fue clave para que el Alavés sumase su primer punto de la temporada. El Betis puso a prueba la faceta defensiva del Glorioso sobre todo en la última media hora del partido y los de Luis García Plaza no tuvieron más remedio que echar un paso atrás para arañar el ansiado punto. La expulsión de Sedlar a falta de cinco minutos para el final por un codazo a Chimy Ávila -un verdadero dolor de cabeza- cuando se disponía a encarar a Sivera también tuvo mucho que ver en el sufrimiento albiazul.
Las triangulaciones entre Nabil Fekir, Ez Abde y Chimy Ávila -los dos últimos entraron al verde en el minuto 63- pusieron patas arriba la línea defensiva del Glorioso que se escudó en la inspiración de su portero para seguir en el partido. Nabil Fekir se encontró con el guardameta valenciano en el uno contra uno, cuando en su mirada ya tenía fijada el pase de la muerte al argentino. Estas tres balas triangularon en el 85 -poco antes de la expulsión del central albiazul- para crear otra acción peligrosísima en la que Sivera poco pudo hacer pero al que le salvó la falta de tino de Fekir tras un pase raso del atacante rosarino, que sufrió en sus pieles la grandeza de Antonio Sivera -ovacionado por un Mendizorrotza de gala- en el minuto 91, con un remate a botepronto a la salida de un córner.
INICIATIVA ALBIAZUL
No todo fue sufrimiento para el Glorioso, que tuvo la iniciativa del partido en la primera mitad, con un juego más vertical y con una presión alta que le permitió recuperar balones cerca de los dominios de Rui Silva.
Los béticos buscaron con ahínco la banda derecha, por la que llegaron en varias ocasiones, pero el Alavés no dejó de lado su planteamiento con un Carlos Vicente estelar -acompañado por Stoichkov y Kike en la punta y Conechny en la izquierda- que logró el primer tanto en el minuto 18 pero no subió al marcador por fuera de juego previo de Kike. Los andaluces intentaron bajar las revoluciones de un partido que iba al ritmo de los locales. Tras el paso por vestuarios, el ritmo bajó de forma notoria; lo que favoreció al Betis, que tuvo más tiempo para pensar y elegir las mejores opciones, lo que le hizo sufrir notablemente al Alavés.