La Liga vuelve con sorpresas, como la derrota del Granollers con Villa Aranda
La reanudación de la Liga Asobal tras el parón por el Mundial volvió a dejar muestras de que esta es una temporada un poco loca. Por arriba el Barcelona es prácticamente el único que no vacila. Arrolló al Aragón, como se esperaba, con la nota destacada de los 10 goles del entrenador-jugador del club aragonés Demetrio Lozano. El primero de los demás equipos, el Naturhouse, pasó muchísimos apuros en Cuenca, una pista que se le atraganta y donde había perdido en sus cuatro últimas visitas. Esta vez logró vencer, pero por muy poco (24-25).
El Granollers sigue sumando capítulos a su mala racha. Acabó el 2014 con dos derrotas en Liga y una en la final de la Copa Asobal, y empezó 2015 con un empate en la Copa. El sábado perdía en casa ante el Villa de Aranda y ya acumula cinco partidos seguidos sin ganar. El choque tuvo gran protagonismo brasileño, con los mundialistas vallesanos Valadao y Toledo sumando 6 goles entre ambos, cifra que igualaba Patrianova en el bando burgalés. Y además, Dos Santos sumaba otros 6 para el club arandino.
En Iruñea Anaitasuna decepcionaba ante el Benidorm, que le devolvía la moneda de la primera jornada liguera, cuando los navarros habían ganado en la pista alicantina.
El Cangas perdía 6-13 a los 20 minutos ante el Puerto Sagunto, cuando cambió a su portero montenegrino Mijuskovic por el joven de origen venezolano Edu Salazar, que lideró la remontada con 14 paradas de 24 remates (58%), y los gallegos se llevaron el triunfo (27-26) que casi les asegura la permanencia un año más.
En el Guadalajara-Gijón, entre los irundarras Iker Antonio (7) y Peciña (3), y el extremo mundialista brasileño Chiuffa (5), encarrilaban la victoria ante los asturianos, y el Puente Genil cerraba una semana muy productiva: el miércoles se acercaba a la Final Four de Copa, y el sábado ganaba al Huesca en Liga. Mejor, imposible.