Caja Laboral e Ipar Kutxa ha informado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores de que sus respectivos consejos rectores han aprobado el proyecto de fusión.
Las dos cooperativas de crédito vascas explican que la aprobación de la fusión está sujeta a su refrendo por ambas asambleas generales, convocadas para el próximo día 30 de junio.
La cooperativa de crédito resultante tras la fusión gestionará más de 25.000 millones de euros en activos, con más de 1,3 millones de clientes en 450 oficinas; contará con una plantilla de más de 2.500 empleados y unos recursos propios de 1.700 millones de euros.
La nueva caja tendrá su sede social en Arrasate -donde está localizada Caja Laboral- y su consejo rector contará transitoriamente con quince miembros, doce de ellos de la entidad guipuzcoana y tres de Ipar Kutxa, según consta en el protocolo de integración.
El objetivo de la fusión consiste en constituir un proyecto cooperativo "con altos índices de solvencia y eficiencia" con vocación de "seguir siendo un motor para la economía del país".
"Un modelo que frente a la bancarización del sector financiero apuesta por otra forma de hacer y gestionar entidades desde la óptica del cooperativismo que representan y comparte ambas entidades", ha indicado Caja Laboral.