Las Juntas Generales de Bizkaia han aprobado hoy, con los votos a favor de Bildu y PNV, reclamar la libertad condicional para los presos poíticos con enfermedades graves e incurables, de forma que reciban los tratamientos de salud necesarios «en las condiciones convenientes».
La propuesta, que ha sido rechazada por PSE y PP, ha partido de una iniciativa de Bildu, que ha reclamado la puesta en libertad de los trece presos políticos con enfermedades graves, a la que el PNV ha presentado una enmienda para que la propuesta se haga extensiva a todos los reclusos enfermos.
Jon Sánchez, juntero del PNV, ha afirmado que la legislación española obliga a actuar «de forma activa» para preservar la salud de los presos y ha dicho que la enmienda de su grupo es «inclusiva».
Por su parte, Carmen Carrón, juntera del PP, ha asegurado que el reglamento penitenciario contempla ya la puesta en libertad de aquellos presos «muy graves». Por ello, ha recordado que Iosu Uribetxebarria ha sido puesto en libertad, lo que es una muestra de la «superioridad moral de la democracia».
El juntero del PSE Juan Otermin ha afirmado que las disposiciones legales se están cumpliendo «escrupulosamente», por lo que no se ha denegado la libertad condicional «a ningún preso enfermo en una situación similar a la de Uribetxebarria».
Otermin ha reclamado a Bildu que exija a los reclusos que se acojan «individualmente» a la legalidad penitenciaria «para que inicien cuanto antes su propio proceso de reinserción».
Irene Soto, portavoz de Bildu, ha criticado la «distinta vara de medir» que se viene aplicando a los presos y ha solicitado al Gobierno español que deje de hacer el «ridículo» en Estrasburgo y «dejen de una vez por todas de cumplir su ley de venganza».