Joan Tardà ha tomado la palabra durante el debate de convalidación de un decreto ley sobre pensiones y ha querido recordar que este jueves se cumplen 20 años de la muerte del joven independentista Guillem Agulló, muerto en València a manos de un grupo neonazi.
A pesar de las continuas interrupciones y llamadas al orden del presidente de la Cámara, Jesús Posada, el diputado republicano ha tratado de seguir con su intervención.
En ese momento, Posada le ha leído el artículo 104 del reglamento del Congreso para reiterar que a la tercera llamada al orden se vería obligado a expulsarle de la tribuna e incluso del hemiciclo.
Tardà ha intentado seguir en catalán, pero Posada le ha retirado el uso de la palabra y el diputado ha vuelto a su escaño.
El siguiente diputado en subir a la tribuna, Sabino Cuadra, de Amaiur, ha comenzado su intervención en euskara, idioma en el que ha transmitido su solidaridad a Tardà.
En un tuit enviado minutos después de ser expulsado de la tribuna, Tardà ha lamentado no poder hablar en su lengua materna en el Congreso.
«Nosotros hemos de cambiar de lengua en Catalunya, pero ellos no», ha criticado, en referencia a la sentencia del Tribunal Superior de Justicia del Principat que obliga a la administración catalana a ofrecer clases en castellano si uno de los alumnos así lo pide.
ERC ha reclamado que todos los diputados, sean o no catalanes, se expresen en catalán en la tribuna del Congreso en «justa correspondencia» con el citado fallo.