En una entrevista en Radio Euskadi, Lujua ha mostrado su satisfacción por el acuerdo alcanzado entre PNV y PSE porque «a este país le hacía falta un pacto de estabilidad. Luego, no estamos tan satisfechos porque, lógicamente, desde el ámbito empresarial, nos hubiese gustado que tuviese más importancia a la traslación a la economía real que lo que se va a conseguir con este pacto. Pero globalmente es un buen acuerdo que debía ser suscrito por más partidos políticos».
Ha opinado que, «si hay un ahorro, al final, entre 1.100 y 1.500 millones de euros», les hubiese gustado que fuera «directamente dirigido a la creación de empleo. Porque, al final, si creamos empleo, tenemos personas que cobran, que pagan impuestos y que consumen». Sin embargo, ha reconocido que «hay que comprender que hay necesidades sociales que atender».
«Quizá, la parte más significativa es que es una subida de impuesto que no tiene fecha de caducidad. Entendemos que, en esta situación económica, todo el mundo tiene que aportar, que los que más tienen deben aportar más, las empresas también van a tener que hacer un esfuerzo muy importante en este crecimiento de costes fiscales y esto tiene que tener una finalidad y un fin», de tal forma que «cuando la recuperación económica llegue» se debe producir «una reducción de impuestos porque, si no, no competimos».
Respecto a la relación con los sindicatos, Lujua ha señalado que Lakua «ha hecho todo lo que tenía que hacer para acercar posturas, pero, al final, el acuerdo tiene que ser entre sindicatos y empresarios, y ese acuerdo, finalmente, no se pudo hacer por la composición sindical que hay en Euskadi».
Además, ha rechazado las declaraciones realizadas por el diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao, en las que criticó el comportamiento de algunos empresarios que, teniendo beneficios, aprovechaban la reforma laboral para despedir empleados.
Lujua, que ha señalado que cree que esto no es así, ha apuntado que los empresarios vascos «son los más tibios de todo el Estado. Yo estoy muy orgulloso de cómo representamos al tejido empresarial, a diferencia de otras comunidades. Aquí, cuando decimos una cosa, la cumplimos. Los empresarios vascos son responsables, y si alguien que lo hace mal, habrá que denunciarle, habrá que llamarle y pedirle las explicaciones. No se puede generalizar. Yo lo que generalizo es el buen comportamiento empresarial».