El primer acto ha tenido lugar en la plaza de Errekalde, donde se alza el monolito en homenaje a Muguruza y ante el cual se ha bailado un aurresku y se han depositado claveles rojos. La que fuera su compañera Elena Bartolomé, su hija Ane Muguruza, Edurne Brouard, históricos dirigentes abertzales como Itziar Aizpurua o Tasio Erkizia, una nutrida delegación de Sortu encabezada por Hasier Arraiz o el expreso Patxi Gómez, que acaba de abandonar la cárcel tras la sentencia de Estrasburgo, han sido algunos de los rostros conocidos. También ha acudido Mónica Hernando, de la Oficina de Víctimas de Lakua.

A renglón seguido, los presentes se han desplazado hasta el parque de Amezola, donde se encuentra el monolito de homenaje a Brouard. En este lugar se ha sumado Itxaso Atutxa, presidenta del Bizkai Buru Batzar del PNV.   

Idoia Muruaga, en nombre de familiares y allegados, ha tomado la palabra para subrayar que «no vamos a comulgar con ruedas de molino. Los que enterraron bajo su suelo ético a Lasa y Zabala, bajo su ética cal viva, no nos van a dar lecciones ni a exigir rectificaciones o perdones unilaterales. Estamos dispuestas a estrechar la mano a quien quiera participar en un proceso de distensión que favorezca la consolidación de un escenario de paz total, en el que además de no existir violencia se puedan defender y materializar por vía democrática todos los proyectos políticos. Estamos dispuestas a hablar, a reunirnos, a hacer gestos, a ceder... estamos dispuestas a cosas que nos suponen un sacrificio teniendo en cuenta el dolor que nos han causado, pero entendemos que merecerá la pena si con ello ayudamos a generar un futuro mejor para nuestro pueblo. Nuestra mano está tendida a quien nos busque con honestidad. También hemos encontrado otras manos que se nos ofrecían y las hemos estrechado».

Ya esta tarde, Sortu ha llevado a cabo un acto bajo el lema «Santi eta Josu, herriarenak zarete», en el paraninfo de la EHU-UPV en Abandoibarra.

Placa en el Parlamento de Gasteiz

EH Bildu ha anunciado que pedirá ante la Mesa del Parlamento de Gasteiz la colocación de una placa en memoria de Santi Brouard, quien fue parlamentario de HB en dicha Cámara. «Aunque ya han pasado 29 años de la muerte de Santi Brouard, el Parlamento aún le debe un reconocimiento; estamos en contacto con su familia y creemos que es hora de corregir esa situación», ha manifestado Julen Arzuaga, quien ha defendido como «indispensable» que se tengan en cuenta «todas las violencias que ha sufrido y sufre este país, una memoria completa y una historia completa, incluida la realidad del terrorismo de Estado».