Josu Juaristi fue ayer el candidato al Parlamento Europeo más votado en el conjunto de Euskal Herria (en Iparralde computaba como nulo) y la lista que lideraba, por tanto, la primera fuerza del país. Esto, unido al apoyo en otros puntos del Estado -y especialmente por la fuerza del BNG en Galicia- hace que Los Pueblos Deciden obtengan un escaño. Diez años después, la izquierda abertzale vuelve a tener sitio propio en la Eurocámara.

Además, cabe destacar que la coalición de izquierda independentista es la primera fuerza en Gipuzkoa y en Araba, y la segunda en Bizkaia y en Nafarroa. Un dato, este último, al igual que la distribución del voto de izquierdas, muy a tener en cuenta en el futuro próximo.

El PNV obtiene nuevamente unos buenos resultados, con algunos votos más que hace cinco años pero ligeramente por debajo en proporción. Bizkaia vuelve a mostrarse como su feudo. Llamativo, y para analizar en profundidad, es lo ocurrido en Sestao, donde los jeltzales de Josu Bergara han obtenido un crecimiento espectacular después de su proclama xenófoba.

Izaskun Bilbao repite escaño, gracias también a la compañía de Convergencia i Unio. De esta forma, en la próxima legislatura del Parlamento Europeo habrá dos voces a favor del derecho a decidir de Euskal Herria.

Descalabro del PSOE

El PSOE sufre un descalabro sin precedentes en el conjunto de Hego Euskal Herria, perdiendo prácticamente la mitad de los votos obtenidos en 2009. Si algún consuelo pueden tener es que el batacazo en Nafarroa, después de haber traicionado la voluntad de cambio al negarse a presentar la anunciada moción de censura, no ha sido mayor que en el resto del territorio.

El PSOE tiene un enorme problema electoral, puesto que en Euskal Herria y en el resto del Estado es abiertamente incapaz de rentabilizar la caída del PP, mientras se multiplican las opciones electorales a su izquierda que van cobrando fuerza.

Iturgaiz se queda sin escaño

El batacazo del PSOE ha sido impresionante, pero la caída del PP -aunque algo menor- tampoco le va a la zaga. En Araba ha perdido posiciones de forma notable y en Gipuzkoa está a 3.500 votos de una fuerza recién llegada como Podemos. En Nafarroa ha conseguido mantener el primer puesto, pero bajando del 37,8% de los votos en 2009 al actual 25,11%.

Una de las consecuencias de toda esta pérdida de apoyo del PP tanto en Euskal Herria como en el resto del Estado español es que Carlos Iturgaiz, que durante la campaña electoral se había mostrado tan vehemente en contra de las formaciones abertzales, se queda sin escaño. Quien en su día fuera secretario general del PP en la CAV, y que en la actualidad despunta como representante del sector más nostálgico del partido, ocupaba el puesto número 17 de la lista de un PP que ha sumado 16 puestos. Salvo que los intereses internos obliguen a algún realineamiento y uno de sus predecesores se vea obligado a renunciar, Iturgaiz verá desde Bilbo cómo Josu Juaristi e Izaskun Bilbao ocupan sus escaños en la Eurocámara.

La irrupción de Podemos

Podemos aparece, hoy por hoy, como la gran novedad de estas elecciones europeas, con la obtención de nada menos que 5 escaños por la circunscripción única del Estado español. Un fenómeno -probablemente muy ligado a los efectos de la televisión y las redes sociales- que, sin embargo, ninguna encuesta fue capaz de predecir.

Podemos se ha convertido en Euskal Herria en la quinta fuerza, después de las cuatro grandes tradiciones políticas, superando a formaciones de izquierda más clásicas como IU.

El fenómeno merece también su análisis sosegado, puesto que Izquierda Unida ha triplicado sus resultados en los territorios vascos, poniéndose por encima de los 62.000 votos. Y aun así, Podemos le ha sacado una ventaja de unas 10.000 papeletas. En Gipuzkoa, por ejemplo, la formación de Pablo Iglesias pisa los talones al PP.

Primavera Europea, la formación que encabeza Equo y de corte nítidamente ecologista, no ha calado en el electorado vasco, puesto que -pese a haber obtenido un escaño en la Eurocámara- en nuestro país apenas llegó a sumar quince mil votos.

Una mirada general invita a pensar que en el conjunto de Hego Euskal Herria existe un potencial de izquierda muy fuerte, que si consigue articular acuerdos puede emerger como una fuerza de gobierno transformadora.

UPyD, no despega

Pese a que dos de sus cuatro europarlamentarios son vascos -Maite Pagazaurtundua y Fernado Maura-, UPyD sigue sin despertar el interés de los electoral de Euskal Herria. Aunque ayer prácticamente dobló sus exiguos resultados de hace cinco años, su proporción de votos sigue estando todavía en la mitad de los que obtiene en el Estado español.

La escisión ultraderechista del PP, Vox, no ha arraigado en Euskal Herria y su presencia es apenas testimonial, por debajo del 1% en la mayoría de los territorios del país. Parece claro que el electorado derechista vasco considera que las opciones con las que contaba anteriormente ya satisfacen sus necesidades.

Abertzale y de izquierda

Una revisión a los resultados de ayer dibuja una Euskal Herria con una mayoría abertzale y de izquierda. Bien es cierto que se trata de unos comicios europeos y con un enorme índice de abstención. Pero también es cierto que la participación ha sido en esta ocasión superior a la de hace cinco años.

Estos resultados no resultan extrapolables a otros comicios y, quizá menos que a ninguno, a la próxima cita electoral, que será la de las elecciones municipales y forales. Pero a buen seguro las direcciones de los respectivos partidos ya están haciendo sus cuentas, y revisando sus estrategias.

De momento, hoy por hoy, lo que queda es que EH Bildu es la primera fuerza en el conjunto de Euskal Herria y tiene un eurodiputado, mientras el unionismo cae en picado.