«Los inocentes niños palestinos han sufrido demasiado y por mucho tiempo», ha dicho Malala durante su discurso de aceptación del Premio de los Niños del Mundo. Los 50.000 dólares que donará se corresponden con la cuantía total de dicho galardón.
«Sin educación no habrá paz», ha agregado Malala, antes de hacer un llamamiento para que «los niños palestinos y todos los niños del mundo reciban una educación de calidad en un ambiente seguro».
El comisionado general de la agencia de la ONU, Pierre Krahenbul, ha aplaudido la donación de la activista y ha subrayado que el gesto «levantará el ánimo» de los cerca de 250.000 estudiantes y 9.000 trabajadores educativos que trabajan en dichos centros educativos.
«La UNRWA comparte (con Malala) la creencia profunda en la importancia de la educación como un medio para sacar a los jóvenes del aislamiento, la exclusión y la opresión. Conseguir capacidades y conocimiento para mejorar las expectativas de futuro es algo enraizado en la conciencia palestina», ha remachado.
La última ofensiva israelí contra el enclave palestino se saldó con la muerte de 2.100 palestinos, entre ellos más de 500 niños, y más de 70 israelíes. En el marco de la misma, un total de 65 escuelas de la UNRWA sufrieron daños materiales de distinta consideración.