«Estamos muy contentos por haber ganado en Álava y por tener la responsabilidad de gobernar, algo que asumimos de una manera absolutamente clara», ha señalado González en una entrevista concedida a Efe, en la que ha reconocido haber ganado «de una manera ajustada», pero suficiente para tener un procurador más que el PP.
Los jeltzales han conseguido mantener los 13 escaños que tenían hasta ahora y, aunque el PP ha sacado casi 600 votos más, se ha quedado con 12 junteros, frente a los 16 con que contaba hasta ahora.
En tercer lugar se ha situado EH Bildu con 11, Podemos ha irrumpido con 8, el PSE ha sufrido un fuerte descalabro al pasar de 9 a 5 procuradores y otras dos nuevas formaciones, Irabazi y Ciudadanos, han surgido en el panorama foral alavés con 1 escaño cada uno.
El PP, que ha gobernado durante los últimos cuatro años la Diputación alavesa, se proclamó ayer ganador de las elecciones en Araba, pese a tener menos representación que el PNV, y se reivindicó como el vencedor en este herrialde hace 20 años.
«Cada uno es muy libre de decir lo que quiera y de sentirse ganador o no. La realidad es que tenemos un escaño más y en democracia hay que aceptar las reglas de juego», ha comentado González, a quien le «entristece que el PP parezca hoy no aceptar esas reglas».
El PNV, con 13 junteros, necesita 26 para tener mayoría absoluta en la Cámara foral, integrada por 51 procuradores.
Un pacto con el PP le dejaría a 1 de obtener la mitad más 1, con EH Bildu se quedaría a 2 y, sin embargo, si se uniera a Podemos y al PSE obtendría los 26 para lograr esa hegemonía.
«De momento lo que nos toca es hablar con todo el mundo y abrirnos a todas las posibilidades. No tenemos absolutamente nada cerrado ni ningún socio preferente», ha comentado González, quien no descarta «a nadie» a la hora de iniciar esas negociaciones, «ni siquiera a Ciudadanos, que tiene solo un representante».