La candidatura acordada por CDC y ERC con el visto bueno de las entidades soberanistas, Junts pel Sí, ha llenado esta tarde el recinto de la Farga en Hospitalet de Llobregat, una de las plazas fuertes del área metropolitana de Barcelona, clave para las elecciones del 27 de setiembre. La candidatura conjunta toma mayor impulso de esta forma a falta de una semana para la crucial cita plebiscitaria.

El cabeza de lista, Raül Romeva, ha sido el primer peso pesado encima del escenario. Antes de marcharse corriendo a un debate televisivo, el exdiputado de ICV-EUiA ha querido parafrasear a Obama (ha recordado su reciente cita con Felipe de Borbón) para reivindicar que «el miedo no puede ser nunca un argumento en unas elecciones». «Para unos es la campaña del miedo, pero para nosotros es la campaña de las esperanzas, algo está pasando para que gente de orígenes tan diversos e ideologías diferentes estamos», ha enfatizado Romeva.

El candidato a la presidencia (pese a ser el cuarto en la lista), Artur Mas, se ha encargado de poner la guinda al acto, recurriendo a Nelson Mandela: «Dijo algo que nos tenemos que aplicar, ‘que vuestras decisiones respondan a vuestras esperanzas, y no a vuestros miedos’. Eso es precisamente lo que pedimos». El president ha advertido de que «no volveremos a tener una oportunidad como esta en mucho tiempo» y ha augurado que «esta semana que queda no será gratis, vendrá algo, se inventarán alguna cosa».

Antes, el líder de ERC y número cuatro de Junts pel Sí, Oriol Junqueras, ha reivindicado que quieren «la victoria de todo un pueblo, sin exclusiones» y ha subrayado que quieren convencer, a diferencia de otros que únicamente «aspiran a vencer». «Han renunciado a convencernos», ha enfatizado Junqueras, que ha recuperado su profesión de historiador para señalar que «somos el fruto de muchas derrotas, pero también la semilla de todas las victorias». «La libertad, la dignidad y la independencia no se piden, se ganan en las urnas y se defiende en todos los ámbitos», ha concluido el líder republicano.

En su turno, la número tres de la lista además de expresidenta de Òmnium Cultural, Muriel Casals, ha señalado que quieren un país normal «en el que no se amenace y en el que se vote sin injerencias». «Las amenazas hacen más pequeña la democracia española», ha considerado Casals, que ha apuntado que «en las urnas todos los votos valen lo mismo, tanto el de un trabajador humilde como el de un miembro del consejo de administración de una entidad financiera».

La número dos de Junts pel Sí y expresidenta de la ANC, Carme Forcadell ha sido la encargada de calentar el ambiente preguntando al público si están «preparados para ganar la libertad y para hacer lo que haga falta». Forcadell ha entrado al trapo con la banca: «Han dicho que si Catalunya es independiente se marcharán. Pues que se vayan. Si no respetan la voluntad de Catalunya no merecen tener nuestros ahorros». Forcadell también ha advertido de que «de aquí al 27 de setiembre pasarán todavía muchas cosas». «Tenemos que estar preparados y mantenernos unidos», ha pedido.

Previamente, Eduardo Reyes, presidente de Súmate, la plataforma de castellanohablantes a favor de la independencia, fue el siguiente en tomar la palabra, llamando «cansino» a Mariano Rajoy: «¡Es el que me hizo a mí independentista!». «Nos han amenazado, pero ya no tenemos nada que perder, nos han quitado hasta el miedo», ha reivindicado Reyes, quien ha añadido: «En mi DNI dice que soy español, y así es, soy cordobés. Pero también estoy donde quiero estar, y por lo tanto, soy catalán».