El presidente de la República ha asegurado que este «acto de guerra» ha sido «preparado» desde el exterior y ha contado con «complicidad» desde el interior. Aunque ningún grupo se ha atribuido directamente la responsabilidad del ataque, Hollande ha citado en su mensaje a Estado Islámico.
«Francia será implacable ante los bárbaros del DAESH», ha advertido el presidente, que ha abogado por utilizar todos los instrumentos del Estado de Derecho y actuar «en todos los terrenos, tanto dentro como fuera de Francia».
Hollande ha sugerido de esta forma que seguirá apoyando la coalición que lidera Estados Unidos y ha subrayado que trabajará «de forma concertada» con otros «aliados» que también son objeto de la amenaza del EI.
El presidente, que este sábado ha reunido a su Consejo de Defensa, ha decretado tres días de luto y ha reiterado que «todos los dispositivos» de seguridad continuarán reforzados «al máximo nivel». De esta forma, y bajo el paraguas del estado de emergencia, las fuerzas policiales y militares mantendrán sus patrullas.
Hollande se dirigirá al Parlamento el próximo lunes para reclamar «unidad» y «sangre fría» ante la «prueba». «Francia es fuerte y aunque pueda resultar herida siempre se levanta (...). Francia es valiente y triunfará ante la barbarie», ha sentenciado.