Los imputados en el sumario 04/08 han hecho hincapié en la necesidad de sumar fuerzas para «mover esa gran losa que supone el inmovilismo de Madrid». «Situamos ahí nuestra ofensiva, somos 35 ciudadanos más en esta gran tarea de avanzar. Queremos un pueblo sin juicios políticos, queremos un futuro en paz y de soluciones, y haremos lo que esté en nuestras manos para arrastrar esta losa del inmovilismo», han destacado Karmele Aierbe y Patxi Urrutia, dos de los encausados, ante los medios presentes en el aparcamiento de las piscinas de Gamarra, desde donde han partido hacia Madrid.
Allí, ante los magistrados de la Audiencia Nacional, defenderán a partir de mañana que son «hombres y mujeres de paz. Que todos nosotros y nosotras queremos una Euskal Herria libre, independiente y socialista. Y que luchábamos por ello en 2005, 20006 y 2007, y que seguimos en la misma lucha ahora, cada uno de nosotros en su sitio de trabajo». A este respecto, cabe recordar que muchos de los imputados, entre los que figuran Pernando Barrena, Nekane Erauskin, Marije Fullaondo e Ino Galparsoro, se enfrentan a penas de diez años de prisión por su militancia política.
«Durante el último decenio se han dado grandes cambios en nuestro país. Sin embargo, poco o nada ha cambiado en la Audiencia Nacional: el Estado español continua con su política de negación y represión, intentando impedir el cambio en marcha. Y esta actitud nos acarrea consecuencias muy dolorosas que no podemos ocultar», han denunciado los imputados, que han abonado más de 1,2 millones de euros en fianzas y han permanecido 54 años en prisión preventiva, a la espera de que finalice un proceso que arrancó en 2007, con la redada de Segura.