Las movilizaciones exitosas del sábado y la posición trasladada por Rufi Etxeberria a EPPK han devuelto la cuestión irresuelta de los presos al meollo de la política vasca. Las afirmaciones de Etxeberria en Iruñea, planteando una recaracterización del Colectivo y una apuesta audaz por las vías jurídicas, tuvieron ayer importante eco mediático y suscitaron algunas reacciones políticas. Así, fuentes del Gobierno de Lakua interpeladas por Europa Press indicaron que trabajarán para «buscar cuál es la interpretación real de la declaración» y, en concreto, para ver «si va a ir acompañada de hechos concretos que permitan avanzar en la normalización en la convivencia en Euskadi».

Lakua quiere saber, por ejemplo, «si se apuesta por que los reclusos, de forma individual, puedan pedir o no beneficios penitenciarios» y especialmente «progresión de grado». Lo segundo resulta imprescindible para lo primero.

Estas fuentes dijeron que, a la espera de ello, toman esta intervención de Rufi Etxeberria como «una nueva declaración de intenciones», pero añadiendo que «en esta legislatura llevan unas cuantas y deja muchas dudas sobre cómo se debe interpretar». Por ello, afirmaron que de momento no entran a «calificarla ni descalificarla».

Más dudas mostró Idoia Mendia desde el PSE, entrevistada en Euskadi Irratia. Cree que «es muy difícil ver avances, porque un día dicen A y al siguiente B, pero los presos siguen igual y la izquierda abertzale no ha querido dar verdaderos movimientos». Se preguntó incluso si la consecuencia del discurso de Etxeberria será que EPPK entre en la «vía Nanclares», cuando este matizó expresamente que la apelación a la «audacia» tiene como límites «el arrepentimiento y la delación», términos que ha usado tradicionalmente el Colectivo para referirse a la vía citada por Mendia.

La secretaria general del PSE obvió, de paso, que ni siquiera esos presos (actualmente apenas una decena) han logrado solucionar su retorno a casa, dado que el Gobierno del PP tampoco ha abierto esa puerta.

Desde el PP, Nerea Llanos reflejó igualmente que no ve o no quiere ver novedades: «Uno le escucha [a Etxeberria] y parece que está escuchando lo de hace diez años, hablando de lo mismo, de los presos, cuando los ciudadanos vascos tienen hoy muchas más preocupaciones que les ocupan en su día a día».

Uxue Barkos, lehendakari navarra, también fue preguntada por las palabras del dirigente de Sortu, dado que incluyeron apelaciones tanto a Lakua como a Iruñea para avanzar en este terreno. Respondió que «este gobierno está y va a estar siempre contra la vulneración de cualquier tipo de derechos, también los penitenciarios». Y añadió que Iruñea reclamará la competencia para gestionar prisiones, como consta en el acuerdo cuatripartito de cambio.

Los presos de Villepinte agradecen el apoyo

En una carta remitida a los medios, los tres presos políticos vascos – Arkaitz Agirregabiria, Oroitz Gurrutxaga e Igor Uriarte– encarcelados en Villepinte agradecen a la ciudadanía el apoyo recibido en su protesta por el cambio del régimen de visitas impuesto por la nueva directora.

La petición de envío de cartas al centro penitenciario ha tenido gran respuesta, ya que la dirección ha recibido más de 600 misivas provenientes de Euskal Herria. Esa iniciativa, junto a otras (carteles, folletos informativos, rechazo de vuelta del patio a las celdas, «mitard»...), han hecho que la actitud de esta haya empezado a cambiar. «No hemos recuperado aún las condiciones de antes pero ha comenzado a retroceder en su insensata imposición», manifiestan antes de asegurar que la directora «se ha dado cuenta de que no estamos solos, de que la dispersión afecta a mucha gente, de que es injusta y de que los ciudadanos vascos exigen que se acabe». Esperan que «corrija su actitud y que en un clima de respeto y seriedad lleguen cambios, a mejor por supuesto».

Tras subrayar que hay presos (enfermos, aislados...) «en peores condiciones que nosotros en Villepinte», recuerdan que «la llave para abrir todas las puertas la tenemos todos nosotros, los que estamos dentro y los que estáis fuera».A.M.