Hacía 10 años que Arnaldo Otegi no viajaba fuera de Euskal Herria para ejercer su labor política. Al margen quedan, obviamente, las conducciones entre cárceles o a los juzgados en territorio español, durante los seis años y medio que ha estado en prisión. Según recuerda Otegi mientras espera en la fila para hacer el transbordo que le llevará desde Heathrow hasta Dublin, la última vez que viajó con una misión fue cuando estuvo en Ginebra, en la primavera de 2006, como parte de la delegación de la izquierda abertzale en aquel proceso negociador.
Desde aquel viaje a este ha pasado una década intensa, que ha cambiado el país profundamente. Probablemente, de un modo bien diferente al que todo el mundo esperaba, desde la izquierda abertzale a la comunidad internacional. Paradójicamente, Otegi ha vivido esa mutación de realidad que él ayudo a construir desde el otro lado del muro, con la impotencia que eso provoca. De estos diez años, ha pasado casi ocho en prisión. Y ha salido de la cárcel reforzado en sus convicciones y con un análisis reposado sobre lo sucedido, el momento actual y el futuro. Todo ello ha sucedido a la fuerza, es lo que tiene la cárcel, pero en sus primeros mitines y entrevistas públicas ha demostrado que está en forma.
En su viaje por Europa, en el que a partir de hoy recorrerá Dublín, Londres y Bruselas, Otegi busca agradecer la solidaridad recibida, tanto a nivel personal como al proceso abierto hace ahora cinco años en Euskal Herria. Tal y como adelantó en sus primeras intervenciones, también quiere escuchar lo que algunos representantes de la comunidad internacional que han apoyado el proceso vasco tienen que decir. Sin duda, sus opiniones le servirán para hacerse una composición de lugar más afinada sobre lo sucedido desde que fue encarcelado.
Agenda en Irlanda
Tras llegar a Dublin, Otegi se ha reunido con Bertie Ahern, ex primer ministro irlandés y la persona que leyó la histórica Declaración de Aiete. Al término del encuentro, en declaraciones a los medios de comunicación, Otegi ha afirmado que los dos líderes han coincidido en que «el diálogo es la única fórmula para alcanzar la paz y resolver los conflictos».
Además, el líder abertzale ha afirmado que ambos han consideran que «la comunidad internacional no entiende la postura del Gobierno español».
De las seis personalidades que firmaron la Declaración Otegi se reunirá a lo largo de estos seis días con tres de ellas: Bertie Ahern, Gerry Adams y Jonathan Powell.
Mañana el líder independentista participará en un homenaje al Alzamiento de Pascua de 1916, dentro de los eventos del centenario, y por la tarde hablará en el Ard Fheis, la conferencia anual del Sinn Féin. En este contexto, tiene previsto reunirse con los líderes republicanos. El domingo parte para Londres, donde tiene una agenda apretada que incluye reuniones privadas y eventos públicos.
Acompañan a Otegi en su gira europea el ex senador Urko Aiartza y Gorka Elejabarrieta, del equipo de relaciones internacionales de Sortu. Su labor ha sido crucial para lanzar la campaña internacional por la liberación de Otegi, que ha reunido el apoyo de personalidades de todo el mundo, desde el ya mencionado Gerry Adams hasta Pepe Mujica o Angela Davis, entre otras muchas.