«No es la apariencia, es la esencia. No es el dinero, es la educación. No es la ropa, es la clase»
Coco Chanel
Mientras en el Estado español, tristemente incluidas Euskal Herria y Catalunya, en las redes sociales algunos debatían sobre la corbata de Arnaldo Otegi, este preparaba su intervención en Westminster. El debate sobre la etiqueta no es nuevo para la izquierda abertzale. La víspera, en Chinatown, el propio Otegi recordaba a Jon Idigoras –«cómo hubiese disfrutado aquí; ¡y lo qué nos hubiésemos reído!»–, que ya tuvo su polémica al respecto hace más de dos décadas. Lo realmente novedoso era que un líder de la izquierda abertzale, un ex preso político vasco, fuese a hablar en la Casa de los Comunes británica.
Así lo dijo el propio Otegi en la charla: el hecho de que él estuviese dando una conferencia en Westminster era la prueba más clara de la naturaleza política de los presos vascos, aunque el Gobierno español lo niegue.
Humor con mensaje
También era la primera vez que se hablaba en euskara en esa institución, aunque consciente de la importancia de las lenguas Otegi pidió disculpas por no poder hacerlo en inglés. En broma, prometió aprenderlo si es encarcelado de nuevo.
El líder de los independentistas adaptó su mensaje al público, que estaba formado por representantes políticos que participan en el «All Party Group on Conflict Issues» (grupo interpartidario sobre conflictos de la Cámara), por vascos de la diáspora londinense y por un buen grupo de periodistas, la mayoría vascos y españoles. Presidía el galés Hywel Williams, portavoz de Plaid Cymru.
Por ejemplo, Otegi recurrió al humor varias veces, algo que sorprendió a más de uno, viniendo de alguien liberado recientemente.
Pero es que Otegi integra en su discurso todo lo que le parece interesante, y le había llamado la atención que, por la mañana, Jonathan Powell subrayase que no veía rencor en él pese a lo que le habían hecho.
Bien, pues ese iba a ser uno de los mensajes centrales de la tarde. Tras denunciar la política inhumana del Gobierno español con los presos y sus familiares, le acusó de seguir anclado en «una lógica que se construye desde el rencor y la venganza». «Yo, sin embargo, no mantengo ningún rencor hacia nadie», añadía, a la vez que llamaba a mantener esa actitud por responsabilidad. «Lucharemos desde la seducción y la amabilidad, pero con esa misma amabilidad les decimos que no vamos a renunciar a nuestros principios, a nuestro proyecto», sentenciaba.
Otegi reivindicó con orgullo la lucha desarrollada en favor de ese proyecto, que resumió diciendo que «queremos una república digna, independiente, que defienda los intereses de la mayoría».
Obstrucción y complejos
Antes también había mostrado ese mismo orgullo por el cambio de estrategia, que aceptó que no había sido fácil. Aquí denunció la posición obstruccionista del Gobierno español, subrayando la paradoja de que ETA esté dispuesta al desarme y Madrid no quiera saber nada. No dudó en decir que «no quieren una solución».
Considera que el esquema antiterrorista ha tapado durante mucho tiempo otras crisis del Estado español, al que tachó de «acomplejado». Esa postura «contrasta con la que el Reino Unido ha mantenido tanto en el Norte de Irlanda como en Escocia». Frente a eso, en perspectiva de futuro, Otegi ve «dos anclajes: el apoyo de nuestro pueblo y el de la comunidad internacional». Aprovechando el foro, renovó su compromiso para llevar hasta el final el camino emprendido antes de ser encarcelado.
Solidaridad y elegancia
Entre las invitadas, una representante del SNP aportó su experiencia con el referéndum, la cuestión del miedo y la generacional, mientras que el Sinn Féin mostró su solidaridad y apoyo al proceso vasco.
Dilek Ocalan, representante kurda y sobrina del líder encarcelado, expuso el caso kurdo, las similitudes con la causa vasca y expresó su solidaridad, ante lo que Otegi pidió la liberación de Ocalan, subrayó las similitudes entre la cultura política hispana y otomana y, como ya hizo al salir de prisión, recordó a las guerrilleras que luchan contra el ISIS.
Para concluir, el experto en mediación Irvin Rappaport le agradeció en nombre de los anfitriones que, siendo ese un grupo sobre conflictos, alguien fuese a reivindicar la sonrisa como método de lucha y de resolución.
Siguiendo libremente a Coco Chanel, ayer Otegi dio en Westminster una conferencia sobre la esencia –de su lucha por la libertad de Euskal Herria–, sobre la educación –y la seducción como armas para convencer a propios y extraños–, y sobre la clase –en concreto, la clase de un político que es–. Un político tan diferente de los comunes que acaba de pasar seis años y medio en la cárcel y ayer habló en Westminster.
Isilunera deitu dute Bruselan, «ETAren ahotsa»-ren aurka
Europar Legebiltzarrean hizlari izango da gaur Arnaldo Otegi, eta horrek amorrua eragin du konponbide prozesuaren aurka dauden espainiar sektoreen artean. Mariano Rajoy bera haserre ageri zen igandean, eta atzo Maite Pagazaurtunduak eta Teresa Jimenez-Becerrilek minutu bateko isilunera deitu zuten gaurko, erakunde horren eraikinaren atarian. Biak ere ETAren ekintzetan hildako pertsonen senideak dira; Pagazaurtundua, UPyDko eleduna eta Jimenez-Becerril, PPko eurodiputatua.
Europako legebiltzarkideei bertan parte hartzeko gonbita zabaldu diete, azalpen honekin: «Sinestezina litzateke hemen Bruselako metroko eta aireportuko atentatuengatik zigorturiko terrorista jihadista bati hitza ematea. Hori dela eta, zaila egiten zaigu europar demokraziaren bihotzean ETAren ahotsa dena hitz egiten irudikatzea».
Barne ministro espainol Jorge Fernandez Diazen aburuz, Otegi ezin da «bake gizon» gisa hartua izan, hori «terrorismoaren memoriari irain egitea» litzatekeelako.