Un total de 172 diputados han votado en contra de Corbyn, mientras que 40 se han pronunciado a favor, lo que supone un 81% de votos en contra. La moción, pese a no ser vinculante, evidencia que el actual líder ha perdido el apoyo del grupo parlamentario menos de un año después de llegar al cargo.
La votación, de hecho, constituye la culminación de una cadena de dimisiones de su equipo más próximo como consecuencia de las dudas de la gestión de Corbyn durante la campaña para el referéndum sobre el Brexit, lo que llevó a Corbyn a remodelar su equipo.
Pese al resultado, el líder laborista ha mantenido que no dimitirá, «dado que sería una traición» a todo el que le ofreció su apoyo hace menos de un año.
Las parlamentarias Margaret Hodge y Ann Coffey presentaron la moción de confianza contra su líder el pasado viernes, horas después de conocer el resultado del Brexit. «El referéndum europeo era una prueba a su liderazgo y creo que Jeremy suspendió ese examen. Fue demasiado lento, poco entusiasta en la campaña y los votantes laboristas, simplemente, no entendieron el mensaje», argumentó Hodge.
La laborista Diane Abbott, nombrada portavoz de Sanidad laborista tras la cascada de dimisiones en el equipo de Corbyn, ha defendido poco antes de la moción de confianza que la votación de hoy «no tiene significado». «Los parlamentarios no son quienes eligen al líder laborista, lo hace el partido. Creo que es muy triste que los compañeros hayan elegido representar este circo. No quieren que haya unas elecciones al liderazgo porque no están seguros de si las ganarían», ha afirmado.