El histórico dirigente de la izquierda abertzale Rufi Etxeberria recordó ayer que la Conferencia de Aiete y la respuesta que ETA le dio con el «cese definitivo de su actividad armada» formaban parte de una hoja de ruta comprometida a través de facilitadores internacionales entre la organización vasca y el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Entre esos compromisos estaba también que, como se recogió en la declaración oficial, Madrid tratara de buscar con ETA soluciones a las consecuencias del conflicto.

Rufi Etxeberria participó ayer junto al expresidente del PSE y negociador, Jesús Eguiguren, en el programa “Faktoria” de Euskadi Irratia. Y hablando de los preparativos de la Conferencia Internacional de Aiete y la posterior decisión de ETA, apuntó que para la izquierda abertzale ese camino fue mucho más largo, puesto que cuando en los años 2009-2010 abordaron su cambio de estrategia ya estaban en contacto con agentes de la comunidad internacional.

Tras el proceso “Zutik Euskal Herria”, «facilitadores internacionales» aprovecharon ese paso «para abrir vías de contacto tanto con ETA como con el Gobierno de Zapatero. Como no se podía hacer un acuerdo bilateral –evocó Rufi Etxeberria– los facilitadores lograron compromisos por un lado con el Gobierno de Zapatero y por otro con ETA. Por unas vías u otra pudimos ir conociendo todo ese camino y, por tanto, fueron días muy intensos los que nos llevaron a Aiete».

«Hoja de Ruta Resultante»

Jesús Eguiguren dijo que él no conocía que hubiera acuerdos previos. Pero Rufi Etxeberria detalló que «esos compromisos existen y están en manos de los facilitadores internacionales».

Aseguró, sin ser desmentido, que «unos días antes [de la conferencia] nosotros tuvimos conocimiento de esos compromisos. Los tuvimos en las manos y los pudimos leer. Eran 16 compromisos que en castellano tenían el título de "Hoja de Ruta Resultante"».

Preguntado sobre sus contenidos, explicó que «uno de ellos era la propia celebración de la Conferencia y el paso que ETA debía dar como consecuencia de ello. Y el Gobierno español debía garantizar que una delegación de ETA se instalará en un Estado europeo y debatir con ella y tratar de acordar sobre las consecuencias del conflicto».

Etxeberria destacó el compromiso de Jesús Eguiguren y también señaló que Zapatero era dentro del Gobierno el más implicado. Por contra, criticó a Alfredo Pérez Rubalcaba, que estuvo en el proceso de gestación de la Conferencia pero luego impidió que asistiera Tony Blair.